Trump acusa a Obama de intervenir sus teléfonos; "Es falso", niega portavoz del expresidente

Donald Trump (d), saluda a Barack Obama, el día de su investidura como el 45º presidente de los Estados Unidos.

"Cuán bajo ha caído el presidente Obama para pinchar mis teléfonos durante el muy sagrado proceso electoral. Esto es Nixon/Watergate. Mal tipo (o enfermo)!", señaló en otro tuit.

El presidente estadounidense, Donald Trump, acusó este sábado a su antecesor, Barack Obama, de intervenir su teléfono durante la campaña electoral del año pasado.

En la mañana del sábado el presidente de Estados Unidos escribió en su cuenta de Twitter @realDonaldTrump: "¡Terrible! Acabo de enterarme de que Obama hizo que intervinieran mi teléfono en la Torre Trump justo antes de la victoria. No encontraron nada. Esto es McCarthismo!"

"Apostaría a que un buen abogado podría llevar adelante un gran caso por el hecho de que el presidente Obama pinchaba mis teléfonos en octubre, justo antes de la elección!", escribió Trump en Twitter.

"Cuán bajo ha caído el presidente Obama para pinchar mis teléfonos durante el muy sagrado proceso electoral. Esto es Nixon/Watergate. Mal tipo (o enfermo)!", señaló en otro tuit.

Uno de los principales asesores de Obama en temas de Segaridad Nacional Ben Rhodes, respondió a la acusación también desde su cuenta de Twitter:

"Ningún Presidente puede ordenar intervenir los teléfonos. Esas restricciones se implementaron pera proteger a los ciudadanos de personas como usted", escribió Rhodes que fue asesor adjunto de seguridad nacional durante el mandato de Obama y su principal negociador en los 18 meses de conversaciones secretas con La Habana.

Horas después un vocero de Obama declaró: "Ni el Presidente Obama ni ningún otro funcionario de la Casa Blanca ha ordenado jamás vigilar a ningún ciudadano de los Estados Unidos, cualquier sugerencia en sentido contrario es sencillamente falsa".

En la breve declaración emitida por el portavoz Kevin Lewis, se explica que "una regla crucial de la Administración Obama era que ningún funcionario de la Casa Blanca interfiriera jamás en cualquier investigación independiente que estuviera realizando el Departamento de Justicia".