Oficialistas y opositores marcharán por separado este jueves en la capital de Venezuela para conmemorar, los primeros, el día nacional de la juventud y recordar, los segundos, las protestas que hace un año sacudieron al Gobierno socialista del presidente Nicolás Maduro y dejaron 43 muertos y centenares de heridos.
Las marchas de los dos bandos se dan en medio de un tenso ambiente generado por la crisis económica en la que está sumida Venezuela por la inoperancia del socialismo tipo Cuba que impone el Gobierno y que ha dejado una galopante inflación, severos problemas de desabastecimiento, y una recesión que amenaza con profundizarse ante la caída de los precios del petróleo que es la principal fuente de ingresos del país.
Los sectores aliados al Gobierno convocaron a una marcha en el norte y centro de la capital para celebrar el día nacional de la juventud y conmemorar 201 años de la Batalla de la Victoria, una de las gestas históricas que se libró por la independencia de Venezuela del reino de España.
Pero más a tono con la realidad el movimiento estudiantil opositor espera realizar una concentración y una marcha en los alrededores de la estatal Universidad Central de Venezuela, en el centro norte de Caracas, para conmemorar el aniversario de las protestas contra el Gobierno que arrancaron hace un año y se extendieron por casi cuatro meses.
El saldo de las protestas
Las manifestaciones callejeras del año pasado dejaron 43 personas fallecidas, 878 lesionados y centenares de detenidos, entre ellos el líder opositor Leopoldo López, quien está recluido desde hace casi un año en una cárcel militar a las afueras de la Caracas.
Durante cuatro meses llovieron las denuncias del uso de grupos paramilitares conocidos como colectivos, arresto de menores, torturas en los centros de detención, allanamientos de viviendas y despliegue de guardias en centros universitarios y agresiones contra periodistas.
La Guardia Nacional Bolivariana "disparó deliberadamente a los periodistas", asegura un informe de Reporteros sin Fronteras publicado hoy que agrega que más de 20 profesionales de los medios de comunicación fueron detenidos entre febrero y abril de 2014 y que las autoridades venezolanas sacaron del aire la señal de la televisora colombiana NTN24.
La versión oficial
La fiscal general de Venezuela, Luisa Ortega Díaz, informó que 41 personas permanecen detenidas por su participación en la ola de protestas.
Hubo "43 personas fallecidas, 878 lesionados y (...) fueron aprehendidas 3.351 personas de las cuales solo quedan privadas de libertad 41", indicó Ortega durante una rueda de prensa en la que ofreció un balance de la actuación del Ministerio Público (MP) en relación con los casos que surgieron de aquellos incidentes.
"De las privadas de libertad 27 son civiles y 14 funcionarios policiales y de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB)", añadió.
La Fiscal señaló que de los 43 fallecidos, 33 son civiles y 10 pertenecían a distintos cuerpos policiales y a la FANB, que prestó apoyo en aquellos días a través de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB, policía militarizada).
En cuanto a los 878 lesionados, 600 fueron civiles y 278 pertenecientes a cuerpos de seguridad.
Ortega reveló que de las 3.351 personas detenidas en aquellos días "1.436 fueron sobreseídas, 1.402 acusadas, 6 están con archivo fiscal y 507 todavía están en el proceso de investigación".
El 12F
El 12 de febrero del 2014 una marcha antigubernamental convocada por organizaciones universitarias a la que se sumaron opositores políticos y sus simpatizantes derivó al finalizar, en Caracas, en una serie de actos violentos desencadenados por los agentes represivos de los que resultaron muertas tres personas.
Ese día fue el inicio de jornadas de protestas en varios puntos del país que se extendieron por alrededor de cuatro meses, en las que acabó detenido y juzgado, entre otros, al opositor López, acusado por supuesta instigación pública, agavillamiento (asociación para delinquir), daños a la propiedad e incendio por los hechos de aquel día.
Leopoldo López, coordinador nacional del partido opositor radical Voluntad Popular, fue el principal promotor de la estrategia "La Salida" para forzar con protestas callejeras la renuncia del presidente Nicolás Maduro, y fue recluido preventivamente en una cárcel militar desde el 18 de febrero de 2014, tras entregarse voluntariamente a las fuerzas gubernamentales.
En marzo de 2014 el presidente de la Asamblea Nacional (AN), Diosdado Cabello, anunció que la opositora María Corina Machado perdía su cargo como diputada ante el Parlamento Nacional por haber "aceptado un cargo del gobierno hostil de Panamá como representante alterno" ante la Organización de Estados Americanos (OEA).
La idea anunciada por Machado era usar la silla de Panamá para denunciar al Gobierno de Nicolás Maduro por la violenta represión de las protestas y pedir la aplicación de la Carta Democrática de la organización que impone sanciones a las naciones que infrinjan el orden constitucional.
La bancada oficialista en la Asamblea Nacional había impulsado un expediente ante el Tribunal Superior para quitarle la inmunidad parlamentaria a Machado.
El Gobierno acusó a los alcaldes de San Cristóbal, Daniel Ceballos, y el de San Diego, Vicencio Scarano, de apoyar las protestas por lo que los puso bajo arresto y los destituyó de sus cargos.