Caos en Venezuela, 51 muertos en 52 días; incendian casa de Chávez

Agentes de la Guardia Nacional Bolivariana detienen a manifestantes hoy, lunes 22 de mayo de 2017, en Caracas (Venezuela)

Las protestas contra el gobierno izquierdista de Nicolás Maduro cobraron fuerza hoy con tres muertos y decenas de miles de personas en las calles de Venezuela entre violentos disturbios.

La represión gubernamental a las protestas de la oposición antichavista ha dejado este lunes tres muertos y elevaron a 51 la cifra de fallecidos en 52 días de marchas.

Las protestas contra el gobierno izquierdista de Nicolás Maduro cobraron fuerza hoy con decenas de miles de personas en las calles de Venezuela entre violentos disturbios

La jornada de protestas opositoras degeneró en caos en el estado Barinas (oeste), región natal del fallecido expresidente Hugo Chávez, con estallidos callejeros que derivaron en tres muertos por la represión, incluidos dos jóvenes de 19 y 22 años. Los tres perdieron la vida por heridas de bala.

La vieja casa donde el fallecido presidente Hugo Chávez pasó parte de su infancia en la ciudad suroccidental de Barinas fue incendiada el lunes por manifestantes en medio de disturbios que dejaron al menos tres fallecidos, oficinas públicas quemadas, comercios saqueados y una instalación de la Guardia Nacional atacada.

Decenas de manifestantes, algunos con los rostros cubiertos con camisetas, bloquearon algunas de las principales vías de Barinas, capital del estado del mismo nombre, e incendiaron la vivienda donde creció Chávez cerca del centro de la ciudad, indicó a The Associated Press el diputado opositor Pedro Luis Castillo, habitante de esa localidad.


Castillo dijo que también fueron incendiadas las sedes regionales del Consejo Nacional Electoral, del oficialista Partido Socialista Unido de Venezuela y de un instituto estatal de vivienda.

También en ese estado, según el vicepresidente Tareck El Aissami, manifestantes a los que llamó "terroristas" incendiaron la sede del gubernamental Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), atacaron destacamentos de la militarizada Guardia Nacional y de la policía regional, saquearon comercios y destruyeron un almacén de medicamentos.

En Caracas, un chaparrón de gases lacrimógenos impidió avanzar a más de 20.000 opositores -según cálculos de AFP- y miembros de la Federación Médica Venezolana (FMV), que salieron a protestar por la "catastrófica" situación de los hospitales ante la falta de insumos y medicamentos en el país.

"¿Si tengo miedo? Da más miedo seguir viviendo", se quejó Raúl, de 64 años, un médico general. "La salud es un desastre. Estamos en el peor estado de los últimos 30 años", dijo a la AFP Fernando Gudayol, cirujano de 50 años.

También en la capital venezolana, seguidores del chavismo se concentraron en el Palacio presidencial de Miraflores, donde preveían ser recibidos por Maduro, pero el presidente finalmente no acudió. Maduro convocó a una mega marcha "por la paz" para este martes.

La oposición debe redoblar su apuesta en las calles pese a la violencia y a una vida cotidiana que puede ser insoportable, con colas interminables para conseguir alimentos o el tránsito paralizado por barricadas, marchas o protestas.

Desde que se iniciaron las protestas el 1 de abril, hubo 2.660 detenidos, de los cuales al menos 161 han sido encarcelados por órdenes de tribunales militares.

El sábado, más de 160.000 personas -según los organizadores- se congregaron en la principal autopista de Caracas pero fueron dispersados con gases lacrimógenos, a lo que los manifestantes respondieron con piedras y cócteles molotov.

Y más de 40.000 personas (según cálculos de AFP) protestaron en la ciudad de San Cristóbal, en el estado de Táchira, fronterizo con Colombia, hacia donde Maduro ordenó el envío de 2.600 militares tras disturbios y saqueos.

[Agencias AP y AFP]