Nicolás Maduro sigue con sus diabólicos planes

Vista de los enfrentamientos entre un grupo de personas adeptas al oficialismo y personas opositoras al gobierno nacional durante la consulta popular el domingo.

Nicolás Maduro debe tener un ataque de nervios, junto con su cohorte de facinerosos, ante los resultados de la Consulta Popular que rechazó por completo los planes chavistas de apoderarse completamente de Venezuela.

Sin embargo, el mandatario venezolano, más calmado, consultó con La Habana y recibió la orden de no aflojar e imponer la Constituyente, pese a los resultados del plebiscito.

Pinochet

Nicolás Maduro no es Augusto Pinochet, que acató los deseos del pueblo chileno y aceptó los resultados del referendo del miércoles 5 de octubre de 1988, en que la oposición le consultó a ese país andino sobre su permanencia en el poder.

Unos 7. 435. 913 chilenos acudieron a votar. Al final del total de votos escrutados, el «Sí» obtuvo el 43,01 % y el «No», el 54,71 %.

Como relató más tarde el Jefe de Prensa de la Moneda, Rafael Kistteiner, se le sugirió a Pinochet ignorar ese resultado debido a lo estrecho del margen. Pero el General, golpeando en énfasis con su puño la mesa, declaró: "es la voluntad del pueblo... y se hará como él quiere".

Conforme a las disposiciones transitorias de la Constitución chilena, el triunfo del «No» implicó la convocatoria para 1989 de elecciones democráticas conjuntas de presidente y congreso, que condujeron tanto al fin de la dictadura, como al comienzo del período llamado "transición a la democracia".

Sin embargo, este principio básico no lo va a aceptar jamás el gobierno de Cuba, se le escaparían las entradas que obtiene de Venezuela para mantenerse en le poder. Y la orden a Maduro es, "seguir adelante con la Constituyente".

Prensa cubana

Por eso, la prensa oficialista cubana destaca hoy que el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, expresó que el pueblo de Venezuela a través de su amplia participación en el ensayo electoral constituyente ha reflejado que el camino para solucionar las dificultades es la paz.

No se habla de los dos muertos y varios heridos en la consulta popular del domingo, víctimas de los colectivos al servicio del gobierno chavista.

También la prensa cubana resalta que la rectora del Consejo Nacional Electoral venezolano (CNE), Sandra Oblitas, aseguró que el domingo hubo una “gran afluencia” de personas participando en el simulacro electoral de los comicios para la Asamblea nacional Constituyente y resaltó que hasta el momento no se han reportado incidentes. (Los de la oposición no se toman en cuenta).

“Gran afluencia de personas, para familiarizarse con las particularidades del sistema de votación”, señaló la rectora, quien además resaltó que este proceso que se activó a solicitud del presidente Nicolás Maduro, para cambiar la Carta Magna, es “muy sencillo” y rápido.

Oblitas señaló que se desplegaron en todos los municipios del país 1.943 máquinas de votación, lo que aseguró que garantiza al menos una máquina por municipio para “hacer pruebas técnicas y de tiempo”, y que a su vez permitan “mejorar para el propio día de la elección”.

Para este simulacro no hay observadores nacionales ni internacionales, pero aseguró que sí los habrá para las elecciones del 30 de julio.

El Poder Electoral venezolano convocó este ejercicio para que los ciudadanos practiquen la votación para las elecciones de quienes serán los redactores de una nueva y eventual Constitución venezolana, que se prevé se realicen el próximo 30 de julio.

Las máquinas de votación

Hay real recelo en Venezuela ante los resultados de las máquinas de votación.

La oposición recuerda el estrecho márgen de los resultados en las elecciones de 2013 entre Nicolás Maduro y Henrique Capriles.

El candidato del chavismo obtuvo el 50,66% de los votos y Henrique Capriles el 49,07%, según los datos difundidos por CNE en las elecciones del 13 de abril de 2013.

Apenas seis meses después de que Chávez ganara con diez puntos de ventaja a Capriles (1,6 millones de votos), Maduro logró apenas 234.935 sufragios más que el líder opositor en una votación en la que participó el 78.71% de los 18,9 millones de venezolanos convocados a las urnas.

Ramiro Váldes

Se recuerda que el general cubano Ramiro Valdés visitó Venezuela en 2010.

Valdés, ministro de Comunicaciones e Informática, está al frente de las tareas de censura en el mundo de la comunicación, especialmente en el área de Internet.

La llegada de Valdés a Venezuela, en febrero de 2010, se produjo en medio de multitudinarias protestas de estudiantes y opositores venezolanos por el cierre de medios de comunicación y por su inconformidad con la política autoritaria y ultraizquierdista del presidente Hugo Chávez.

La excusa de la presencia del cubano en la nación bolivariana era que iba a solucionar los problemas de energía, pero analistas venezolanos estimaron que el propósito fundamental de Valdés era alterar las máquinas de votación para futuras consultas con el pueblo.

Por todo esto, hay temor a las manipulaciones de los resultados de la consulta al pueblo de Nicolás Maduro, quien no parará ante nada para terminar de convertir a Venezuela en una completa Cuba o peor aún, en una nueva Corea del Norte.