La autora dijo en entrevista a Diario Las Americas que llegará el día en que sus libros, y los de tantos escritores todavía prohibidos en la isla, se puedan leer de manera natural.
La laureada escritora Zoé Valdés entrevistada en exclusiva por el periodista independiente Iván García para Diario Las Américas, desde Cuba, dijo que su exilio lo motivó la falta de libertad en la isla, la coacción y presión constantes, además de los horrores de los que fue testigo personal y en colectivo durante años, y que la copa se colmó con las gotas del hundimiento del remolcador Trece de Marzo y con la crisis de los balseros, en 1994.
Agregó la autora que cuando arribó a París por segunda ocasión, con su familia, se dijo que observaría desde lejos, y que vería tras la publicación de su libro La nada cotidiana, que ya se estaba fraguando a escondidas, o medio oculta, qué pasaría, pero que recibió amenazas, y le dijeron que no podría regresar nunca más a Cuba si seguía haciendo las declaraciones que hacía en los periódicos del mundo entero, tras el éxito de su novela.
Y apunta que “No me lo mandaron a decir con nadie, no, vinieron a la casa donde yo estaba alquilada y me lo dijeron de frente. Y entonces después sobrevino el gran plan para silenciarme, el de acabar conmigo, el de llamarme pornógrafa, y de todo, insultarme, calumniarme, además de seguir mis pistas y enviar siempre tras de mis triunfos a alguien para que recogiera lo que yo sembraba, poniéndome la mala además con las personas que trabajaron conmigo, por suerte, no todas son tontas ni castristas, ni siquiera sensibles a serlo”.
La escritora recordó su debut en la literatura, cuando Bernardo Marqués Ravelo publicó un poema suyo en El Caimán Barbudo, en la sección Cartas a los lectores y, luego, cuando su libro Todo para una sombra salió en España, en Taifa, y lo vino a ver en la vidriera de una librería, junto a un ejemplar maravilloso de la Correspondencia entre Salvador Dalí y Gala, y que entonces no sabía si llorar de alegría, dar saltos, o quedarse tiesa.
La autora, quien por otro lado anunció hoy que cerraba su blog para tener más tiempo para dedicar a otras labores, manifestó que es una pena que no se lean sus libros ni los de otros cubanos exiliados en Cuba y que, sin embargo, tiene ahora otros públicos que le dan grandes alegrías, y con los cuales se identifica, y que a través de ellos ha aprendido mucho del mundo.
Pero, agregó que un día llegará en que sus libros, y los de tantos escritores todavía prohibidos en la isla, se puedan leer de manera natural, y ser adquiridos por su precio natural por una persona que trabaje de manera natural y no sea tratada como el peor de los esclavos. Porque eso es lo verdaderamente triste, la esclavitud en la que viven sumidos los cubanos, como si esto fuera lo verdaderamente natural, cuando es lo antinatural, lo inhumano, agregó Valdés.
Con respecto a su trabajo literario actual la autora dijo: “Acabo de terminar mi primer libro en francés, y estoy siempre en esa novela de Batista, que espero finalizar este año, sólo sea por cumplir con El Hombre en el ochenta aniversario del 4 de septiembre. El 2 de mayo saldrá en Francia una novela titulada La noche al revés, en la editorial Arthaud de Flammarion”.
Cuestionada sobre las acusaciones de ser batistiana que le hace el régimen cubano, la autora declaró: “Para haber sido batistiana, como lo fue, por cierto, una gran parte de la población cubana de a pie, tenía que haber vivido antes del año 1959, lo que no pudo ser posible porque nací en ese fatídico año. Mi curiosidad por Fulgencio Batista y Zaldívar viene desde lejos, al igual que a unos cuantos jóvenes, que tampoco son tantos, me picó la curiosidad debido a la mala propaganda que siempre le dieron los castristas al ex presidente, pero mi curiosidad resultó sobre todo porque ansiaba conocer la verdad, y en esa verdad hay de todo como en botica, porque el eslabón Batista, el cubano prefirió, para su comodidad, lanzarlo al olvido; creo que hasta que no nos reconciliemos con ese fragmento importante de nuestra historia no podremos reconciliarnos con todo lo demás. El gobierno de Batista, hoy está comprobado, fue muchísimo mejor que la tiranía castrista, y sin embargo algunos siguen empecinados en probar lo contrario y en negar lo que ya es tan evidente, que los Castro han asesinado a más cubanos que Batista, y que sus crímenes comenzaron cuando decidieron ser terroristas en la misma época de Batista y cuando a posteriori se convirtieron rápidamente en dictadores, en cuanto se aferraron al poder.
Respecto a sus críticas a la bloguera Yoani Sánchez, Zoé Vadés dijo que nunca ha tenido polémica con Yoani Sánchez, y que hubiera sido saludable tenerla. “Yoani Sánchez nunca contestó a ninguna de mis observaciones, ni a mis emailes. Está en su derecho de no hacerlo. La rareza es que públicamente en sus twitters ella dice que me admira, que me lee, que me ama, etc. Pero eso se lo dice a los que intercambian twitters con ella, porque a mí me tiene bloqueada en sus twitters precisamente, en Voces Cubanas y en su Facebook. O sea que no entiendo su amor, su admiración, ni todo lo demás, y su bloqueo después, será que ella piensa que soy masoquista como al parecer lo es ella. No lo soy. Tampoco he pleiteado con ella. Mi enemiga no es ella. Son los Castro. Pero desde luego, mientras más se ponga ella de parte del raulismo light, mientras más siga pidiendo las boberías de internet, y los cambios cosméticos que pide, más esa pedigüeñería constante que sólo enfoca mundialmente la atención hacia ella, y armándose de ese doble lenguaje que usa, como sucedió en Brasil y luego dijo otra cosa medio camuflada en Miami, no puedo estar de acuerdo con ella. Vivir en democracia no es fácil, hay que esforzarse y aprenderla, aprehenderla, hay que saber que uno tiene derechos y deberes”.
Para leer más de este extensa entrevista, haga clik en Diario Las Américas.
Agregó la autora que cuando arribó a París por segunda ocasión, con su familia, se dijo que observaría desde lejos, y que vería tras la publicación de su libro La nada cotidiana, que ya se estaba fraguando a escondidas, o medio oculta, qué pasaría, pero que recibió amenazas, y le dijeron que no podría regresar nunca más a Cuba si seguía haciendo las declaraciones que hacía en los periódicos del mundo entero, tras el éxito de su novela.
Y apunta que “No me lo mandaron a decir con nadie, no, vinieron a la casa donde yo estaba alquilada y me lo dijeron de frente. Y entonces después sobrevino el gran plan para silenciarme, el de acabar conmigo, el de llamarme pornógrafa, y de todo, insultarme, calumniarme, además de seguir mis pistas y enviar siempre tras de mis triunfos a alguien para que recogiera lo que yo sembraba, poniéndome la mala además con las personas que trabajaron conmigo, por suerte, no todas son tontas ni castristas, ni siquiera sensibles a serlo”.
La escritora recordó su debut en la literatura, cuando Bernardo Marqués Ravelo publicó un poema suyo en El Caimán Barbudo, en la sección Cartas a los lectores y, luego, cuando su libro Todo para una sombra salió en España, en Taifa, y lo vino a ver en la vidriera de una librería, junto a un ejemplar maravilloso de la Correspondencia entre Salvador Dalí y Gala, y que entonces no sabía si llorar de alegría, dar saltos, o quedarse tiesa.
La autora, quien por otro lado anunció hoy que cerraba su blog para tener más tiempo para dedicar a otras labores, manifestó que es una pena que no se lean sus libros ni los de otros cubanos exiliados en Cuba y que, sin embargo, tiene ahora otros públicos que le dan grandes alegrías, y con los cuales se identifica, y que a través de ellos ha aprendido mucho del mundo.
Pero, agregó que un día llegará en que sus libros, y los de tantos escritores todavía prohibidos en la isla, se puedan leer de manera natural, y ser adquiridos por su precio natural por una persona que trabaje de manera natural y no sea tratada como el peor de los esclavos. Porque eso es lo verdaderamente triste, la esclavitud en la que viven sumidos los cubanos, como si esto fuera lo verdaderamente natural, cuando es lo antinatural, lo inhumano, agregó Valdés.
Con respecto a su trabajo literario actual la autora dijo: “Acabo de terminar mi primer libro en francés, y estoy siempre en esa novela de Batista, que espero finalizar este año, sólo sea por cumplir con El Hombre en el ochenta aniversario del 4 de septiembre. El 2 de mayo saldrá en Francia una novela titulada La noche al revés, en la editorial Arthaud de Flammarion”.
Cuestionada sobre las acusaciones de ser batistiana que le hace el régimen cubano, la autora declaró: “Para haber sido batistiana, como lo fue, por cierto, una gran parte de la población cubana de a pie, tenía que haber vivido antes del año 1959, lo que no pudo ser posible porque nací en ese fatídico año. Mi curiosidad por Fulgencio Batista y Zaldívar viene desde lejos, al igual que a unos cuantos jóvenes, que tampoco son tantos, me picó la curiosidad debido a la mala propaganda que siempre le dieron los castristas al ex presidente, pero mi curiosidad resultó sobre todo porque ansiaba conocer la verdad, y en esa verdad hay de todo como en botica, porque el eslabón Batista, el cubano prefirió, para su comodidad, lanzarlo al olvido; creo que hasta que no nos reconciliemos con ese fragmento importante de nuestra historia no podremos reconciliarnos con todo lo demás. El gobierno de Batista, hoy está comprobado, fue muchísimo mejor que la tiranía castrista, y sin embargo algunos siguen empecinados en probar lo contrario y en negar lo que ya es tan evidente, que los Castro han asesinado a más cubanos que Batista, y que sus crímenes comenzaron cuando decidieron ser terroristas en la misma época de Batista y cuando a posteriori se convirtieron rápidamente en dictadores, en cuanto se aferraron al poder.
Respecto a sus críticas a la bloguera Yoani Sánchez, Zoé Vadés dijo que nunca ha tenido polémica con Yoani Sánchez, y que hubiera sido saludable tenerla. “Yoani Sánchez nunca contestó a ninguna de mis observaciones, ni a mis emailes. Está en su derecho de no hacerlo. La rareza es que públicamente en sus twitters ella dice que me admira, que me lee, que me ama, etc. Pero eso se lo dice a los que intercambian twitters con ella, porque a mí me tiene bloqueada en sus twitters precisamente, en Voces Cubanas y en su Facebook. O sea que no entiendo su amor, su admiración, ni todo lo demás, y su bloqueo después, será que ella piensa que soy masoquista como al parecer lo es ella. No lo soy. Tampoco he pleiteado con ella. Mi enemiga no es ella. Son los Castro. Pero desde luego, mientras más se ponga ella de parte del raulismo light, mientras más siga pidiendo las boberías de internet, y los cambios cosméticos que pide, más esa pedigüeñería constante que sólo enfoca mundialmente la atención hacia ella, y armándose de ese doble lenguaje que usa, como sucedió en Brasil y luego dijo otra cosa medio camuflada en Miami, no puedo estar de acuerdo con ella. Vivir en democracia no es fácil, hay que esforzarse y aprenderla, aprehenderla, hay que saber que uno tiene derechos y deberes”.
Para leer más de este extensa entrevista, haga clik en Diario Las Américas.