Enlaces de accesibilidad

Mundo

La amenaza de Medvedev: un ataque nuclear convertiría a Kyiv en un "punto gris" en el mapa

El ex presidente ruso y actual vicepresidente del Consejo de Seguridad, Dmitry Medvedev, ha aumentado la amenaza de Moscú sobre la opción nuclear.
El expresidente ruso y actual vicepresidente del Consejo de Seguridad, Dmitry Medvedev, ha aumentado la amenaza de Moscú sobre la opción nuclear.

El expresidente ruso Dmitry Medvedev lanzó esta amenaza en caso de que se flexibilicen las restricciones contra el uso de armas occidentales por parte de Ucrania.

Getting your Trinity Audio player ready...

Funcionarios rusos han amenazado con que una posible decisión de Occidente de permitir que Kyiv utilice armas donadas para atacar más profundamente en territorio ruso resultaría en una importante escalada de su guerra contra Ucrania que podría incluir el uso de armas nucleares.

El expresidente ruso Dmitry Medvedev, ahora vicepresidente del Consejo de Seguridad de Rusia, advirtió el 14 de septiembre que Kyiv podría convertirse en un "punto gris derretido" si se flexibilizaran las restricciones contra el uso de armas occidentales por parte de Ucrania.

Kyiv ha dicho repetidamente que necesita poder realizar ataques de mayor alcance en territorio ruso para defenderse de las fuerzas invasoras rusas.

La idea ha ganado fuerza en las últimas semanas cuando el presidente ucraniano Volodymyr Zelenskyy presentó sus argumentos, y algunos líderes europeos adoptaron el argumento para darle a Ucrania capacidades de mayor alcance y, según se informa, Gran Bretaña se acerca a una decisión de permitir que Ucrania use sus misiles Storm Shadow contra territorio ruso.

Se esperaba que el presidente estadounidense Joe Biden y el primer ministro británico Keir Starmer discutieran el tema el 13 de septiembre durante sus conversaciones en Washington.

Sin embargo, la Casa Blanca no mencionó el tema en su declaración posterior a la reunión de Biden con Starmer.

La declaración sólo decía que los dos líderes habían discutido una serie de temas y "reafirmaron su apoyo inquebrantable a Ucrania mientras continúa defendiéndose de la agresión de Rusia".

En una aparente referencia a la reunión, Medvedev escribió este 14 de septiembre que "los imbéciles anglosajones" no quieren admitir que la "paciencia" de Rusia ha llegado a su fin y que los expertos que han sugerido que Rusia podría recurrir al uso de armas nucleares contra Ucrania tendría razón si se agota esa paciencia.

"¿Cuál piensan los líderes occidentales y sus instituciones políticas, jugando a la guerra, que sería la reacción de nuestro país ante probables ataques con misiles 'profundamente en el territorio [de Rusia]'?" escribió Medvedev, quien ha utilizado con frecuencia su posición para expresar amenazas contra Kyiv y Occidente desde la invasión a gran escala de Ucrania por parte de Rusia en febrero de 2022.

Medvedev dijo que un conflicto nuclear es una "muy mala historia con un resultado muy difícil", afirmando que es por eso que Rusia no ha decidido utilizar armas nucleares "no estratégicas o estratégicas" hasta este momento. Sin embargo, dijo, si llegara a ser así, habría una "mancha gris derretida gigante" en el lugar de Kyiv, a la que llamaban la "ciudad madre de Rusia".

Esa retórica ha aumentado desde Moscú a medida que Zelenskyy ha presionado cada vez más para obtener mayores capacidades de ataque contra territorio ruso.

El presidente ruso Vladimir Putin dijo el 12 de septiembre que cualquier cambio en la política que permitiera el uso de armas occidentales para ataques de largo alcance significaría que la alianza de la OTAN estaría "en guerra" con Rusia.

"Si ese es el caso, teniendo en cuenta el cambio de naturaleza del conflicto, tomaremos las decisiones apropiadas en función de las amenazas que enfrentaremos", dijo Putin.

En junio, Putin amenazó con enviar armas de largo alcance -en lo que llamó una respuesta "asimétrica"- a áreas del mundo en condiciones de atacar a países que suministran armas a Ucrania.

Rusia también ha dicho que está modificando su doctrina sobre el uso de armas nucleares, y el viceministro ruso de Asuntos Exteriores, Sergei Ryabkov, dijo el 1 de septiembre que la medida estaba "relacionada con la escalada de nuestros adversarios occidentales".

También te puede interesar: #ContraDesinformaciónrusa

El 14 de septiembre, Ryabkov afirmó que la decisión de conceder permiso a Ucrania para realizar ataques de largo alcance contra Rusia ya había sido tomada por Occidente, y que Moscú estaba "preparado para todo" y "respondería al máximo".

El 14 de septiembre, el diputado de la Duma estatal, Andrei Kolesnik, sugirió que Rusia detone un arma nuclear en su propio territorio para recordar a Occidente la amenaza que representa el arsenal nuclear ruso.

"No debemos relajarnos. Necesitamos llevar a cabo una explosión nuclear en algún lugar, en algún campo de pruebas", dijo Kolesnik en una entrevista con el periódico en línea Lenta.ru. "Las pruebas nucleares están actualmente prohibidas aquí, pero tal vez la gente debería ver a qué conduce todo esto."

El jefe de gabinete de Zelenskyy, Andriy Yermak, escribió en respuesta a los comentarios provenientes de Moscú que "las ruidosas historias de horror del régimen de Putin sólo atestiguan su temor de que su terror pueda llegar a su fin".

"Se necesitan decisiones firmes", escribió Yermak en Telegram el 14 de septiembre. "El terrorismo se puede detener destruyendo las instalaciones militares de las que se origina".

El permiso para realizar ataques de mayor alcance, afirmó, "aceleraría la solución" y no permitiría que el "terror ruso" se "extienda a otros países del mundo".

Irán anuncia lanzamiento de satélite

Esta fotografía proporcionada por la Agencia Espacial Iraní (ISA) el 14 de septiembre de 2024 muestra el satélite de investigación Chamran-1 en una ubicación desconocida en Irán.
Esta fotografía proporcionada por la Agencia Espacial Iraní (ISA) el 14 de septiembre de 2024 muestra el satélite de investigación Chamran-1 en una ubicación desconocida en Irán.

Irán puso en órbita el sábado un satélite con un cohete construido por la Guardia Revolucionaria paramilitar, según reportó la prensa estatal. Occidente teme que la República Islámica avance en su programa de misiles balísticos.

Getting your Trinity Audio player ready...

Irán puso en órbita el sábado un satélite con un cohete construido por la Guardia Revolucionaria paramilitar, según reportó la prensa estatal, el último en un programa que Occidente teme que ayude a la República Islámica a avanzar en su programa de misiles balísticos.

El país calificó la iniciativa como un éxito. Sería la segunda vez que logra poner un satélite en órbita con el cohete. No hubo confirmación independiente inmediata del éxito del lanzamiento.

Imágenes distribuidas más tarde por la prensa iraní mostraban al cohete despegando desde un lanzador móvil. El video sugería que el lanzamiento se produjo en la plataforma de lanzamiento de la Guardia ubicada a las afueras de Shahroud, una ciudad a unos 350 kilómetros (215 millas) al este de la capital, Teherán.

El lanzamiento se produce en un momento de creciente tensión en Oriente Medio debido a la guerra que libran Israel y Hamás en Gaza, durante la cual Teherán lanzó un ataque directo sin precedentes con misiles y aviones no tripulados sobre Israel. Por otra parte, la República Islámica sigue enriqueciendo uranio a niveles casi aptos para la fabricación de armas, lo que despierta el temor de los expertos en no proliferación.

Irán identificó el cohete portador del satélite como el Qaem-100, que ya fue utilizado por la Guardia en enero para otro lanzamiento exitoso.

Qaem significa "erguido" en farsi. El cohete de combustible sólido puso el satélite Chamran-1, que pesa 60 kilos (132 libras), en una órbita a 550 kms (341 millas), según la prensa estatal.

Ni el Departamento de Estado de Estados Unidos ni el ejército estadounidense respondieron de inmediato a una petición de comentarios sobre el lanzamiento.

Estados Unidos había dicho antes que el lanzamiento de satélites por parte de Irán desafía una resolución del Consejo de Seguridad Naciones Unidas e instó a Teherán a no llevar a cabo actividades con misiles balísticos con capacidad para transportar armas nucleares. Las sanciones de la ONU relacionadas con el programa de misiles balísticos de la República Islámica expiraron en octubre.

Bajo el mandato de Hassan Rouhani, un expresidente relativamente moderado, el país ralentizó su programa espacial por temor a avivar las tensiones con Occidente, pero el conservador Ebrahim Raisi, que llegó al poder en 2021, le dio un nuevo impulso al programa. Raisi, protegido del líder supremo, el ayatolá Ali Jamenei, murió en un accidente de helicóptero en mayo.

Las intenciones del nuevo mandatario, el reformista Masoud Pezeshkian, no estaban claras, ya que no se pronunció acerca del programa nuclear durante la campaña.

La evaluación de la amenaza mundial realizada este año por la comunidad de inteligencia estadounidense afirmó que el desarrollo por parte de Irán de vehículos de lanzamiento de satélites "acortaría los plazos" para que el país desarrolle un misil balístico intercontinental, ya que emplean una tecnología similar.

Rusia expulsa a 6 diplomáticos británicos acusados de espionaje y "actividades subversivas"

La torre Spasskaya del Kremlin y la catedral de San Basilio al atardecer en Moscú, Rusia, el viernes 13 de septiembre de 2024. (Foto AP/Pavel Bednyakov)
La torre Spasskaya del Kremlin y la catedral de San Basilio al atardecer en Moscú, Rusia, el viernes 13 de septiembre de 2024. (Foto AP/Pavel Bednyakov)

Rusia expulsó a seis diplomáticos británicos que acusó de espionaje, coincidiendo con la visita del primer ministro británico a EEUU, que tiene en la agenda una petición de Ucrania para poder usar armas proporcionadas por Occidente contra objetivos dentro de Rusia.

Rusia acusó el viernes a seis diplomáticos británicos de espionaje y dijo que decidió expulsarlos, un anuncio que coincide con el aumento de las tensiones entre Moscú y Occidente mientras Ucrania aumenta la presión para flexibilizar las restricciones sobre el uso de las armas proporcionadas por Estados Unidos y Reino Unido para lanzar ataques en suelo ruso.

El Servicio Federal de Seguridad de Rusia, conocido como FSB, dijo en un comunicado online que se les retiraron las credenciales y la televisora estatal reportó, citando a un funcionario del departamento, que se había decidido expulsarlos. Londres indicó que las expulsiones se produjeron el mes pasado.

La medida coincidió con la visita del primer ministro británico, Keir Starmer, a Estados Unidos para reunirse con el presidente, Joe Biden, con la petición de Ucrania para poder usar armas proporcionadas por Occidente contra objetivos dentro de Rusia en la agenda.

Durante su viaje a Washington, Starmer indicó que Reino Unido no “busca ningún conflicto con Rusia (...) Rusia inició este conflicto. Rusia invadió ilegalmente Ucrania. Rusia podría poner fin a este conflicto de inmediato”, dijo a reporteros.

“Ucrania tiene derecho a la autodefensa y, obviamente, hemos respaldado totalmente (ese derecho) Estamos proporcionando capacidad de entrenamiento, como saben. Pero no buscamos ningún conflicto con Rusia, no es en absoluto nuestra intención”, añadió.

El FSB dijo haber recibido documentos que indicaban que los diplomáticos fueron enviados a Rusia por una división de la Oficina de Exteriores de Reino Unido “cuya principal tarea es infligir una derrota estratégica a nuestro país”, y que estaban implicados en “actividades de recopilación de inteligencia y subversivas”.

Basándose en estos documentos y “en respuesta a numerosas medidas no amistosas por parte de Londres”, el Ministerio de Exteriores ruso retiró las credenciales a los diplomáticos, apuntó el departamento, que no los identificó. Advirtió que si se descubre a algún otro diplomático llevando a cabo “acciones similares”, se “exigirá el cese anticipado de sus misiones” en Rusia.

De acuerdo con un reporte de la televisora estatal rusa, los seis diplomáticos se reunieron con medios de comunicación independientes y grupos de derechos que habían sido declarados “agentes extranjeros”, una calificación que las autoridades rusas suelen dar a organizaciones y personas críticas con el Kremlin.

Reino Unido calificó las acusaciones contra sus diplomáticos como “totalmente infundadas”. Las expulsiones se produjeron hace semanas, apuntó, vinculándolas a la decisión previa de Londres de revocar las credenciales de un agregado en la embajada de Moscú en la capital e imponer un límite de cinco años a la estancia de los diplomáticos de Moscú en el país.

En mayo, el gobierno británico expulsó al agregado de defensa ruso en Londres alegando que era un oficial de inteligencia no declarado, y cerró varias propiedades diplomáticas del Kremlin en Reino Unido porque, según dijo, estaban siendo utilizadas para espionaje. Una semana después, Moscú expulsó al agregado de defensa británico.

“Las autoridades rusas revocaron la acreditación diplomática de seis diplomáticos de Reino Unido en Rusia el mes pasado, tras las medidas adoptadas por el gobierno británico en respuesta a la actividad dirigida por el Estado ruso en toda Europa y en Reino Unido”, afirmó la Oficina de Exteriores en un comunicado. “No tenemos reparos en proteger nuestros intereses nacionales”.

La vocera del Ministerio de Exteriores ruso, Maria Zakharova, dijo en un comunicado en internet que “estamos totalmente de acuerdo con las evaluaciones de las actividades de los llamados diplomáticos británicos expresadas por el FSB ruso. La embajada británica ha ido mucho más allá de los límites marcados por las Convenciones de Viena”.

Los diplomáticos llevaban a cabo “acciones subversivas destinadas a causar daño a nuestro pueblo”, agregó la nota.

Por su parte, el vocero del Kremlin, Dmitry Peskov, indicó que la ruptura de las relaciones diplomáticas con Reino Unido no era una opción ahora mismo.

Las expulsiones de diplomáticos — tanto de occidentales que trabajan en Rusia como viceversa -- son cada vez más habituales desde que Rusia invadió Ucrania en febrero de 2022.

El medio ruso RBC reportó el año pasado que los países occidentales y Japón habían expulsado a un total de 670 representantes de Moscú entre principios de 2022 y octubre de 2023, mientras que el Kremlin lo hizo con 346 diplomáticos. Según el medio, la cifra superó el total de las dos últimas décadas juntas.

EEUU y Reino Unido acusan a Irán de enviar a Rusia misiles balísticos para utilizarlos en Ucrania

El secretario de Estado Antony Blinken (izq.) en rueda de prensa conjunta con el canciller británico David Lammy, en Londres.
El secretario de Estado Antony Blinken (izq.) en rueda de prensa conjunta con el canciller británico David Lammy, en Londres.

"Rusia ha recibido envíos de estos misiles balísticos y es probable que los utilice en las próximas semanas" en Ucrania, advirtió el secretario de Estado de EEUU, Antony Blinken.

Getting your Trinity Audio player ready...

Estados Unidos y Reino Unido acusaron formalmente el martes a Irán de suministrar misiles balísticos de corto alcance a Rusia para que los use en su guerra en Ucrania y tomarán medidas para castigar a los implicados.

El secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, junto al ministro de Asuntos Exteriores británico, David Lammy, durante una visita a Londres, dijo que las sanciones se anunciarían más tarde el martes.

"Rusia ha recibido envíos de estos misiles balísticos y es probable que los utilice en las próximas semanas en Ucrania, contra los ucranianos", declaró Blinken. "El suministro de misiles iraníes permite a Rusia utilizar una mayor parte de su arsenal en objetivos más alejados de la línea del frente".

Sus comentarios se produjeron mientras él y Lammy se preparan para realizar una visita conjunta el miércoles a Ucrania, donde se reunirán con el presidente Volodymyr Zelenskyy y otros altos funcionarios para tratar el refuerzo de las defensas del país. El Kremlin está intentando repeler la ofensiva sorpresa de Ucrania que se ha cobrado cientos de kilómetros de territorio en la región rusa de Kursk.

Las acusaciones sobre los misiles iraníes podrían envalentonar a Zelenskyy para aumentar aún más la presión sobre Estados Unidos y otros aliados para que permitan a su país utilizar misiles suministrados por Occidente para atacar en el interior de Rusia y alcanzar emplazamientos desde los que Moscú lanza ataques aéreos.

El presidente Joe Biden ha permitido a Ucrania disparar misiles proporcionados por Estados Unidos a través de la frontera con Rusia en defensa propia, pero ha limitado en gran medida su alcance por temor a una mayor escalada del conflicto.

Ello no ha impedido a Ucrania utilizar sus propias armas para atacar objetivos en Rusia, lanzando el martes uno de los mayores ataques con drones en suelo ruso en los dos años y medio de guerra, que tuvo como objetivo múltiples regiones, incluida Moscú.

Lammy calificó las entregas de misiles iraníes a Rusia como "un patrón preocupante que estamos viendo. Es sin duda una escalada significativa".

Irán ha negado haber suministrado armas a Rusia para su guerra en Ucrania.

"Irán considera inhumano el suministro de ayuda militar a las partes implicadas en el conflicto, que provoca un aumento de las víctimas humanas, la destrucción de infraestructuras y el distanciamiento de las negociaciones de alto el fuego", según reza una reciente declaración de la misión iraní ante las Naciones Unidas.

"Por lo tanto, Irán no sólo se abstiene de participar en tales acciones por sí mismo, sino que también hace un llamado a otros países para que cesen el suministro de armas a los bandos involucrados en el conflicto".

La noticia de las supuestas entregas comenzó a surgir durante el fin de semana con informes de que los servicios de inteligencia estadounidenses indicaban que estaban en marcha, según personas familiarizadas con el asunto que hablaron bajo condición de anonimato.

Estados Unidos y sus aliados llevan meses advirtiendo a Irán de que no entregue misiles balísticos a Rusia.

El director de la CIA, William Burns, que se encontraba en Londres el sábado para una comparecencia conjunta con su homólogo de los servicios de inteligencia británicos, advirtió de la creciente y "preocupante" relación en materia de defensa que implica a Rusia, China, Irán y Corea del Norte y que, según dijo, amenaza tanto a Ucrania como a los aliados occidentales en Oriente Medio.

La Casa Blanca ha desclasificado y difundido en repetidas ocasiones resultados de inteligencia que muestran que Corea del Norte ha enviado munición y misiles a Rusia para que los utilice contra Ucrania, mientras que Irán también suministra a Moscú aviones no tripulados de ataque y ha ayudado al Kremlin a construir una fábrica de drones.

China se ha abstenido de suministrar armamento a los rusos, pero ha aumentado las ventas a Rusia de máquinas herramienta, microelectrónica y otras tecnologías que Moscú utiliza a su vez para fabricar misiles, tanques, aviones y otro armamento, según funcionarios estadounidenses.

Biden tiene previsto recibir el viernes en la Casa Blanca al primer ministro británico, Keir Starmer, con el apoyo a la defensa de Ucrania en el orden del día.

Cargar más

XS
SM
MD
LG