El líder opositor Guillermo Fariñas fue liberado sin cargos en la tarde del jueves luego de permanecer dos días detenido en una unidad del Ministerio del Interior (MININT) en la ciudad de Santa Clara, en el centro de la isla.
Fariñas aseguró en conversación con Radio Televisión Martí que fue sometido a interrogatorios por parte de oficiales de la Seguridad del Estado, quienes le acusaron de haber ido a la occidental provincia de Matanzas, la semana pasada, "a coordinar un levantamiento nacional" y que, supuestamente, "esta semana iría a hacer lo mismo en la capital".
Fariñas declaró que defendió ante los oficiales "su derecho a coordinar actividades con los grupos de la oposición".
Cuando fue detenido el martes, Fariñas, Premio Andrei Sajárov 2010, se dirigía a la capital para tramitar una visa con el objetivo de viajar a Bruselas, invitado por el Parlamento Europeo. Tenía previsto participar en un encuentro del subcomité de Derechos Humanos.
Según el opositor, los oficiales le dijeron que "no podían permitir que boicoteara las relaciones económicas entre Cuba y la Unión Europea".
Los agentes también le advirtieron que hasta después del 20 de febrero no puede salir de Santa Clara, que estará constantemente vigilado y, si abandona la ciudad será nuevamente arrestado.
Añadió que los interrogadores le mostraron algunos comentarios de Facebook con el propósito de convencerlo de que "en ningún lugar del mundo" se ocupaban de reflejar su arresto.
Destacadas figuras de la política condenaron el arresto de Fariñas, quien envió sus agradecimientos a todos los países demócratas por su apoyo, solidaridad y respaldo.
Horas antes de su liberación, el presidente del Parlamento Europeo, David Sassoli, había pedido a Cuba la libertad de Fariñas.
"Hago un llamamiento a la liberación inmediata de Guillermo Fariñas, premio Sájarov del Parlamento Europeo en 2010, arrestado en Cuba. La libertad de pensamiento es un derecho que no debe privarse a ninguna persona", escribió Sassoli en su cuenta de Twitter.
