La presa política cubana Arianna López Roque, quien fue detenida junto a su esposo el también opositor Mitzael Díaz Paseiro, durante las protestas pacíficas del 11J en Placetas, Cuba, apoyó desde la cárcel la convocatoria a la Marcha Cívica por el Cambio en Cuba, prevista para el 15 de noviembre.
El líder opositor cubano, exiliado en Miami, Jorge Luis García Pérez "Antúnez", dijo este martes a Radio Martí que López Roque protagonizó una arenga política en la prisión Guamajal, en Santa Clara, que pudo ser escuchada mientras otra presa política realizaba una llamada telefónica.
"En esta arenga Ariana López Roque coreaba consignas de "Abajo Fidel", "Abajo la dictadura", "Libertad para los presos políticos" y pidió al pueblo de Cuba que salga a las calles el día 15 de noviembre, relató Antúnez, representante en el exilio de la Academia Julio Machado.
"En su arenga clamaba al pueblo de Cuba que participara en las protestas que están anunciándose y que ella como prisionera política no iba a ser jamás doblegada", agregó Antúnez.
La madre de dos menores de edad, recientemente galardonada junto a su esposo con el Premio Libertad Pedro Luis Boitel que otorga el Directorio Democrático Cubano (DDC), denunció en la alocución la arbitraria suspensión de sus visitas familiares por su posición mantenida como presa política.
"La Fiscalía Provincial, en complicidad con la policía política, le solicita una e una condena de 8 años de privación de libertad" por su participación en las manifestaciones antigubernamentales, recordó Antúnez.
La Fiscalía Provincial de Villa Clara también pidió ocho años de privación de libertad a Donaida Pérez Paseiro, Nidia Bienes Paseiro, Mitzael Díaz Paseiro, Loreto Hernández García y Ciro Alexis Casanova Pérez, todos de Placetas y miembros de la Asociación Yorubas Libres de Cuba y la Academia Julio Machado. Los opositores están cumpliendo prisión preventiva, en la cárcel La Pendiente, en el caso de los hombres y en Guamajal, las mujeres.
"López Roque es una prisionera política plantada, se niega a vestir el uniforme de reo común, se niega a acogerse al plan de reeducación impuesto por la dictadura y se ha convertido en una en una espina atragantada en la garganta de la dictadura. Lo fue en la calle. Ahora, en la prisión", declaró el expreso político.
El representante en el exilio del Frente de la Resistencia Orlando Zapata Tamayo expreso temor "por la seguridad e incluso por la vida de esta corajuda líder civilista".
"No dudamos que en estos momentos esté siendo golpeada por las hordas represivas de la dictadura castrocomunista", alertó Antúnez.
