Jonathan López, cuñado del preso político del 11J Andy García Lorenzo, fue detenido en la mañana de este martes junto a su pareja, Roxana García Lorenzo, cuando ambos salían de su casa rumbo al trabajo, denunció el padre del joven, Pedro López, antes de salir rumbo a Instrucción Policial, donde permanecía bajo interrogatorio.
En comunicación con Radio Martí, López había advertido que no regresaría “hasta que no regrese con mi hijo”. Según dijo luego Roxana en una directa en Facebook desde los alrededores del lugar, su suegro fue retenido luego de que reclamara la libertad inmediata de su hijo.
"Para las personas que piensan que ya la represión cesó, que la represión fue solo el 11 de julio, para las personas que piensan que con la familia de Andy ya habían cesado, pues... una demostración de que esto no para", dijo la joven.
Añadió que desde el jueves pasado, en que Jonathan fue citado por el jefe de sector de la Policía, la vivienda ha estado bajo la vigilancia constante de la Seguridad del Estado. "Hemos tenido que estar cogiendo por otros lugares para evitar que nos detengan".
Roxana explicó que esta mañana ella y su esposo iban para el trabajo cuando fueron interceptados por un oficial de la Seguridad del Estado en un motor, "el mismo oficial que detuvo a Saily [Gónzalez, ahora exiliada en Miami]".
El agente les indicó que lo siguieran en la motorina hasta la estación policial, o Jonathan sería detenido y conducido en una patrulla, por lo que decidieron seguirlo. Una vez en la unidad, el joven fue conducido a un cuarto de interrogatorio y Roxana permaneció afuera, donde asegura estará hasta tener noticias de su esposo y de su suegro.
Roxana llamó a otros familiares de presos del 11J, y a los cubanos en general, a manifestar su desacuerdo con este tipo de situaciones. "Entiendo el temor que tienen las familias, pero acaben de reaccionar", dijo, y alertó que el acoso de las autoridades no parará.
"¿Qué van a permitir, que esto les siga pasando a las familias de ustedes después? Porque, si se quedan callados, esto es lo que va a pasar".
Pedro López había denunciado que la detención de su hijo y su nuera, temprano en la mañana, se realizó “de manera ilegal y arbitraria porque ellos no forman parte de ningún proceso, ni son testigos de ningún proceso, que es lo que manda la ley para poder usar este tipo de procedimiento”.
Agregó que son “un matrimonio joven, de apenas 18 y 21 años”, y la detención es un castigo por “el activismo que venimos realizando la familia en apoyo a los presos políticos a través del grupo “Ayuda a los valientes del 11J”.
El grupo de ayuda surgió en la ciudad de Santa Clara por iniciativa de la familia del preso del 11 de julio Andy García Lorenzo, a raíz de constatar la situación crítica de muchos de los prisioneros tras las manifestaciones ocurridas el verano pasado en la isla.
Los miembros del grupo recogen donaciones voluntarias de la población, ya que muchos de los detenidos no tienen siguiera familiares que les hagan llegar las conocidas como “javas” o “sacos” con alimentos y productos de primera necesidad, sin los cuales es casi imposible sobrevivir en las cárceles de Cuba.
Las familias García Lorenzo y López García, de las más activas en defensa de los derechos humanos de los reclusos, han afrontado desde mediados de 2021 una verdadera cacería por parte de la policía política del régimen, que va desde persecución, vigilancia, amenazas, interrogatorios, hasta el apuñalamiento en pleno día, y por la espalda, del padre de Andy y Roxana García Lorenzo.