La organización Amnistía Internacional pidió este viernes la liberación del preso político Loreto Hernández García, recluido en la prisión de Guamajal, en la provincia de Villa Clara.
"Desde el 27 de noviembre, su familia no tiene información sobre Loreto, después de que intentara llamar a su hija y la llamada fuera interrumpida mientras le comunicaba detalles de la agresión que había sufrido tras exigir atención médica en la prisión", dijo la organización en la red social X.
Amnistía pidió a las autoridades que el líder yoruba "pueda comunicarse con sus seres queridos".
Hernández fue agredido recientemente por reclusos comunes en la enfermería de la cárcel. Su hermano, el opositor exiliado Jorge Luis García Pérez, conocido por Antúnez, explicó a Martí Noticias la pasada semana que tras la golpiza hay un ensañamiento de las autoridades represivas, que se niegan a brindarle la atención médica requerida.
“Estoy denunciando la vil crueldad de una dictadura que se ensaña contra este valiente cubano que se encuentra internado en la enfermería de la prisión de mayor rigor conocida como Guamajal, información que se ha ido corroborando a raíz de llamadas telefónicas y de otras fuentes de presos cercanos a él”, detalló.
Loreto Hernández García fue arrestado junto a su esposa, Donaida Pérez Paseiro, en Placetas, Villa Clara, a raíz de las protestas del 11 de julio de 2021. En ese momento ambos presidían la Asociación "Yorubas Libres de Cuba".
"Sobre ellos pesa una política represiva de carácter racista y anti religiosa", comentó Antúnez a nuestra redacción.
El caso ha sido denunciado como una violación de la libertad religiosa en Cuba en varios informes del Departamento de Estado de Estados Unidos, la Comisión de Libertad Religiosa Internacional (USCIRF) y por organizaciones como Amnistía Internacional, el Centro de Documentación de Prisiones Cubanas y Solidaridad Cristiana Internacional (CSW, por sus siglas en inglés).
Hernández fue sentenciado a siete años de cárcel y su esposa a ocho.
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