El periodista independiente cubano Guillermo del Sol dijo este martes que la fe es lo que lo sostiene tras 44 día de huelga de hambre en protesta contra la prohibición arbitraria de salida del país que el gobierno cubano impone a activistas y opositores por motivos políticos.
Con voz entrecortada por los efectos del prolongado ayuno, Del Sol dijo a Radio Televisión Martí que bebe agua a duras penas, porque su cuerpo ya no la tolera.
"Tienen que acatar la Constitución o me tendrán que dejar morir", dijo el periodista, y aferrado a su fe sostiene que "el morir para los cristianos es ganancia".
Del Sol agradeció las muestras de solidaridad con su causa. "Seguimos adelante, adradezco lo que hacen por mí y por el pueblo cubano. Hay que tener fe, la fe es la que me sostiene", subrayó.
El activista inició su protesta pacífica el 12 de agosto desde de que en el aeropuerto José Martí, de La Habana, las autoridades de Migración prohibieran a su hijo abordar un avión con destino a Trinidad y Tobago, donde participaría en un evento sobre libertad religiosa.