La vida para muchos jubilados en Cuba se ha convertido en una constante lucha para cubrir las necesidades básicas en medio de la peor crisis económica que ha vivido la isla en décadas.
La activista Dunia Medina, una cubana que cuida de familiares jubilados y apoya a personas mayores que viven solas en su edificio en el barrio de Lawton, en La Habana, describe la situación como un "caos".
“¿Y los viejitos que viven solos, qué comen? No tienen un poder adquisitivo porque aquí todo es elevado; la inflación es por hora”, dijo Medina a Martí Noticias.
La pensión mínima en Cuba es de 1.528 pesos al mes, menos de cinco dólares según la tasa de cambio informal. El propio gobierno ha reconocido públicamente que el ingreso de casi la mitad de los jubilados en el país es insuficiente para vivir en medio de una inflación con tendencia al incremento.
Para Armando Echemendía, residente en Ciego de Ávila, esa cifra debería aumentar. "Lo que pagan no da ni para comer dos días”, aseguró.
“Si una libra de carne de puerco vale 600 pesos y yo cojo 1.600. Una botella de manteca, 700, 800, 900 pesos. ¿Con qué va a vivir uno? Viviendo a fuerza de plátano y yuca”, detalló.
A las carencias se suma la falta de efectivo en los bancos para cobrar las pensiones. En Camagüey, Evelio Ortiz ha tenido que idear su propio sistema con los cuentapropistas para poder poder cobrar sin caer en las largas filas y problemas de los cajeros automáticos.
“Yo de mi tarjeta le hago el pase para su tarjeta; ellos lo que me dan el dinero en vivo, líquido”, explicó.
Zoila, otra jubilada residente en la oriental provincia de Guantánamo, comentó que aún no ha podido recibir la pensión de su esposo, quien falleció en abril. La demora en los trámites burocráticos ha afectado directamente su economía en un momento donde cada peso cuenta. “O no ponen dinero o no hay corriente y las colas son extremadamente engorrosas. Es terrible”, relató.
Aunque Zoila recibe ayuda de sus hijos, lamenta que otros ancianos no tienen esta red de apoyo y enfrentan serias dificultades para sobrevivir. “Aquí vienen personas muy mayores, amigas de mi mamá, y siempre vienen quejándose: ‘Yo no tengo dinero, tengo hambre, estoy pasando trabajo’. Personalmente, trabajé 42 años y me jubilaron con 1.733 pesos. ¿Usted cree que se puede vivir así?”, cuestionó.
El envejecimiento poblacional es uno de los grandes problemas que enfrenta actualmente el país. Cuba registró en 2023 la cifra de natalidad más baja de las últimas seis décadas. Cifras oficiales indican que esa tendencia unida al éxodo masivo de ciudadanos de la isla en los últimos años ha hecho que “en la actualidad la población es menor a 10 millones de habitantes y debe seguir decreciendo".
Foro