El artista y activista cubano Luis Manuel Otero Alcántara grabó un video en el que denuncia la represión en la isla y pide que se use la diplomacia para exigir al régimen de La Habana el fin de la violencia.
"Les estamos convocando, por favor, que nos apoyen, que vigilen nuestras experiencias y sean capaces de exigirle al gobierno cubano desde la diplomacia que cese toda esa violencia hacia nosotros", declaró el principal coordinador del Movimiento San Isidro.
De acuerdo a la iniciativa Democratic Spaces, que publicó el video con un comunicado de prensa, se trata de un mensaje a Canadá y a organizaciones de derechos humanos de todo el mundo, que fue presentado el martes 19 de enero de 2021 en un encuentro con Sebastien Sigouin, Director para Centroamérica, Cuba y República Dominicana de la Cancillería Canadiense.
De acuerdo al comunicado el encuentro fue propiciado por miembros de la comunidad cubano-canadiense que ha pedido al gobierno de Justin Trudeau lo siguiente:
- Reconocer que el régimen que se aferra al poder en Cuba está gobernado por una dictadura totalitaria y depredadora de derechos humanos: la más duradera de su tipo en la historia de América Latina.
- Actuar en consonancia con los valores fundamentales canadienses y alzar públicamente una voz de apoyo moral a quienes dentro de Cuba son protagonistas de la lucha pacífica por los derechos humanos, las libertades individuales, la inclusión y la tolerancia en Cuba.
- Continuar dialogando con la comunidad cubano-canadiense más amplia, amante de la libertad, sobre temas relacionados con la democracia y el pluralismo en Cuba, y pedir al gobierno que implemente acciones concretas para responsabilizar al régimen en Cuba por las violaciones de derechos humanos.
- Encontrar mecanismos de empoderamiento para ayudar a la sociedad civil independiente en Cuba.
- Revisar la política exterior canadiense para abstenerse de una tendencia a colocar los intereses comerciales y económicos por encima de las consideraciones de derechos humanos.
- Implementar acciones en alianza con otros países democráticos del hemisferio para denunciar la situación en Cuba y Venezuela con acciones que resulten en costos políticos para los violadores de derechos humanos.
Democratic Spaces asegura que el diplomático, en nombre del gobierno canadiense, compartió las preocupaciones sobre la difícil situación de los derechos humanos en Cuba y reconoció estar al tanto de la represión contra el Movimiento San Isidro.