Separatistas respaldados por Moscú en el este de Ucrania anunciaron el viernes que planean evacuar a Rusia a las poblaciones de las regiones en conflicto, un giro sorprendente en la crisis que, según Occidente, podría ser usado para justificar una invasión rusa del territorio ucraniano.
Al anunciar la medida en las redes sociales, Denis Pushilin, jefe de la autoproclamada República Popular de Donetsk, dijo que Rusia acordó proporcionar alojamiento a quienes se vayan. Las mujeres, los niños y los ancianos deben ser evacuados primero.
Los líderes de Luhansk, otra región de Ucrania que se autoproclamó república, también ordenaron la evacuación de los residentes.
Se cree que millones de civiles viven en las dos regiones del este de Ucrania controladas por los rebeldes; la mayoría habla ruso y muchos ya han obtenido la ciudadanía rusa.
La zona de conflicto del este de Ucrania experimentó el bombardeo de artillería más intenso en años el viernes, con el gobierno de Kiev y los separatistas intercambiando acusaciones.
Los países occidentales han dicho que creen que el bombardeo, que comenzó el jueves y se intensificó en su segundo día, es parte de un pretexto para invadir.
Estados Unidos dijo que Rusia, que dice que comenzó a retirar tropas cerca de Ucrania esta semana, ha hecho lo contrario: aumentó la fuerza que amenazaba a su vecino a entre 169.000 y 190.000 soldados, desde 100.000 a fines de enero.
"Esta es la movilización militar más significativa en Europa desde la Segunda Guerra Mundial", dijo el embajador estadounidense Michael Carpenter en una reunión en la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE), que tiene su sede en Viena.
Una fuente diplomática con años de experiencia directa en el conflicto describió los bombardeos en el este de Ucrania como los más intensos desde que cesaron los enfrentamientos graves con un alto el fuego en 2015.
Ataques con tanques
Cerca de 600 explosiones se registraron el viernes por la mañana, 100 más que el jueves, algunas con artillería de 152 mm y 122 mm y grandes morteros, dijo la fuente. Se reportaron al menos cuatro rondas de disparos desde tanques.
"Están disparando, a todos y a todo", dijo la fuente. "No ha habido nada como esto desde 2014-15".
Otros funcionarios han cuestionado esos informes, señalando que hubo períodos de enfrentamientos mortales durante el alto el fuego y que hasta el momento no ha habido reportes de muertes en el frente esta semana.
Rusia niega las acusaciones de Occidente de que está planeando una invasión total de Ucrania, un país de más de 40 millones de habitantes, en la que podría ser la guerra más extendida de Europa en generaciones.
Los países occidentales han dicho esta semana que las tropas rusas están haciendo el tipo de preparativos que normalmente se ven en los últimos días antes de una incursión, que podría ocurrir en unos días.
Moscú, por su parte, dijo que estaba observando de cerca la escalada de bombardeos en el este de Ucrania, donde las tropas gubernamentales se han enfrentado a los rebeldes respaldados por Rusia desde 2014. El Kremlin describió la situación como potencialmente muy peligrosa.
Los mercados financieros, en vilo ante la perspectiva de otra guerra en Europa, se habían calmado con el anuncio de que el secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, había acordado reunirse con el Ministro de Asuntos Exteriores ruso, Sergei Lavrov, la próxima semana, siempre que Rusia no invada primero.