El senador Marco Rubio se unió a la senadora Susan Collins y sus colegas para aplaudir la aprobación unánime de su legislación por parte de la Cámara de Representantes "para apoyar a los servidores públicos estadounidenses que han sufrido lesiones cerebrales por probables ataques de energía dirigida".
“La Ley de Ayuda a las Víctimas Estadounidenses Afligidas por Ataques Neurológicos (HAVANA) autoriza una compensación adicional para las personas lesionadas y se aplica a los empleados del Departamento de Estado de los EEUU o de la Agencia Central de Inteligencia (CIA) a discreción del jefe de la agencia respectiva”, dijo Rubio en un comunicado de prensa.
Esta legislación requeriría que la CIA y el Departamento de Estado informen al Congreso sobre cómo se está utilizando esta autoridad y si se requieren acciones legislativas o administrativas adicionales. El Senado aprobó por unanimidad este proyecto de ley el 7 de junio y la Cámara lo hizo el martes. Con la firma del presidente, se convierte en ley.
Síndrome de La Habana, explicó el senador, es el término “que se le da a una enfermedad que surgió entre más de 40 empleados de la Embajada de Estados Unidos en La Habana, Cuba, a partir de 2016”.
Desde entonces, “al menos una docena de diplomáticos estadounidenses en el consulado estadounidense en Guangzhou sufrieron síntomas consistentes con los efectos de la energía de radiofrecuencia dirigida, pulsada y, según el director de la CIA, William Burns, ha habido un par de cientos de casos entre el personal estadounidense. Los informes de prensa indican que algunos de estos casos han ocurrido en suelo estadounidense”.
“Los síntomas han incluido fuertes dolores de cabeza, mareos, tinnitus, problemas visuales y auditivos, vértigo y dificultades cognitivas, y muchos miembros del personal afectados continúan sufriendo problemas de salud años después de los ataques. El HAVANA Act otorgará al director de la CIA, al secretario de Estado y a otros jefes de agencias autoridad adicional para brindar asistencia financiera a quienes sufren lesiones cerebrales como resultado de estos ataques".
Se unieron a Rubio y Collins en la reintroducción de este proyecto de ley bipartidista los senadores Mark Warner (D-VA), Jeanne Shaheen (D-NH), John Cornyn (R-TX), Michael Bennet (D-CO), Roy Blunt (R -MO), Kirsten Gillibrand (D-NY), Richard Burr (R-NC), Martin Heinrich (D-NM), Ben Sasse (R-NE), Dianne Feinstein (D-CA), Tom Cotton (R-AR ), Angus King (I-ME) y Jim Risch (R-ID).