Las autoridades cubanas han incrementado el control policial en las calles ante el empeoramiento de las condiciones de vida de la población, agravadas en medio de la pandemia, como un mecanismo para contener las protestas, dijeron a Radio Televisión Martí activistas y periodistas independientes que residen en la isla.
Desde Guantánamo, el abogado y periodista Roberto Jesús Quiñones Haces señaló que allí la crisis es total y el gobierno no es capaz de resolverla.
La represión, subrayó, “no puede ser la respuesta de un gobierno que se dice que “es del pueblo y para el pueblo”, las autoridades cubanas deben meditar mucho sobre lo que está ocurriendo, porque nadie quiere que Cuba llegue a un estado de violencia civil que sería muy lamentable”.
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Reporte de Tomás Cardoso para Radio Martí
Según el letrado, las autoridades ejercen “una represión absoluta a cualquier síntoma de disenso, porque todos los días van personas presas y, sencillamente, por protestar en la calle debido a las condiciones en las que estamos viviendo”, concluyó el letrado.
En Jovellanos, Matanzas, hay tropas de Boinas Negras en las calles y vigilan hasta las colas, informó el activista Armando Abascal.
Lee también Cifras por las nubes y "pronósticos desfavorables", oscuro panorama del COVID-19 en Cuba“El gobierno tiene a la gente imposibilitada de salir a las calles, así ellos evitan manifestaciones, que la gente se tire a protestar, porque las autoridades saben que el pueblo no aguanta más”, argumentó el opositor.
Según el Observatorio Cubano de Conflictos, en junio ocurrieron en Cuba 249 manifestaciones públicas de protesta.
El municipio de Alquízar, en la provincia de Artemisa, están encerrados hace 15 días. Solo pueden salir a la calle con un permiso, y lo que les han llevado a las casas consiste en cinco cajas de cigarros, un litro de refresco, un paquete de picadillo y otro de perros calientes para todo el núcleo, que incluye a los niños, detalló Diasniurka Salcedo.
“Aquí la represión es muy fuerte, las tropas están en las calles, son Boinas Negras que pegan multas de hasta cinco mil pesos si salimos de nuestras casas. Ellos están temiendo un estallido social, porque la situación de la pandemia se les ha ido de las manos”, destacó la cuentapropista.
Lee también Cubanos responsabilizan al gobierno por drástico aumento de casos de COVID-19; no confían en nuevas medidasAlberto Corzo, en Los Arabos, Matanzas, Director del Instituto Cubano de Liberad de Expresión y Prensa (ICLEP), dentro de Cuba, dijo que en el pueblo tienen toque de queda desde el mediodía, y la organización periodística tiene documentado seis casos de abuso físico policial y un amplio número de multados.
“Es que el pueblo no resiste más. Están viendo el atropello, las brigadas de tropas especiales están dando golpizas, además de las multas que están poniendo. Hace unos días, en el Consejo Popular Lusitania, impusieron 2 mil pesos en multas, aquí en el consejo de San Pedro pusieron ocho mil y en Los Arabos 24 mil; es horrible”, lamentó Corzo.
Y desde el municipio de Banes, en la provincia de Holguín, el activista de la organización opositora Alianza Democrática Oriental, William Tamayo, reporta que los habitantes del lugar sufren el desabastecimiento de alimentos, la falta de agua, los continuos apagones y la represión.
“Pasan por todos los barrios dos autos policiales, acompañados, además, del carro jaula, y usted ve a las personas corriendo, para que no les pongan la multa de cinco mil pesos, porque este pueblo tiene que estar en la calle obligado para buscar los alimentos”, dijo el activista.