A más de seis meses de la acusación por usurpación de la capacidad legal a los periodistas independientes Sol García Basulto y Henry Constantín, la diseñadora y el director de la revista independiente La Hora de Cuba, siguen esperando una respuesta de la fiscalía provincial a sus casos.
Desde marzo pasado, ambos han permanecido bajo vigilancia permanente y sufriendo el acoso de las autoridades luego de que la Seguridad del Estado formulara cargos en su contra y les impusiera medidas cautelares que los limitó de salir del país, y de la ciudad de Camagüey, donde residen.
Más tarde, en junio, las autoridades policiales pasaron el expediente del caso a fiscalía para que procedieran a investigar, y en un término máximo de 20 días, según la legislación actual, debían darles respuesta, explicaron ambos en el programa Cuba al Día, de Radio Martí.
Sin embargo, han pasado tres meses desde esa fecha, y siete desde que fueron acusados, y “seguimos sin respuesta”, dijo García Basulto, que califica todo el caso de "falsedad", e interpreta esa dilación como “una prueba evidente de que no hay pruebas para juzgarlos”.
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Declaraciones de Sol García Basulto
Ha sido muy difícil para nosotros estos meses, señaló Constantín, quien se desempeña como vicepresidente regional de la Comisión de Libertad de prensa de la SIP, y no ha podido asistir a ninguno de los eventos convocados por la organización por las prohibiciones que pesan contra su persona.
Todo este tiempo, los reporteros han sido vigilados, los teléfonos interceptados y las conversaciones escuchadas. Apenas pueden salir a las calles a realizar sus reportajessin ser molestados.
Corren el riesgo de que al usar las cámara para tomar fotos de sus trabajos periodísticos, las autoridades las confisquen, y conviertan su trabajo en “un delito”, precisó Constantín.
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Declaraciones de Henry Constantin
Para el director de La Hora de Cuba es evidente que las acciones buscan sacar la revista de circulación, y agregó que en los últimos meses otros dos reporteros de la publicación han sido citados o molestados por parte de las autoridades, con presiones para que abandonen el proyecto independiente.
El caso de los reporteros fue condenado en la Asamblea General de la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP), que sesionó en Salt Lake City, Estados Unidos, entre los días 27 y 30 de octubre.
(Con la colaboración de Cuba al Día)