El presidente Donald Trump catalogó de "corrupto" y "desestabilizador" al gobierno de Cuba el martes, durante un discurso en la ONU en el que reiteró que no eliminará el embargo comercial hasta que se produzcan reformas en la isla.
La delegación cubana presente en el plenario escuchó la intervención de Trump, en la que también arremetió contra su aliado venezolano.
"No levantaremos las sanciones al Gobierno cubano hasta que haga reformas fundamentales", aclaró Trump en su intervención, la primera que realiza ante la Asamblea General de las Naciones Unidas.
Trump criticó al régimen del presidente venezolano, Nicolás Maduro, y especificó que la meta es restablecer la democracia y las libertades políticas en un país donde consideró que el socialismo ha sido “implementado brutalmente”.
El presidente afirmó que Venezuela está "al borde del colapso total" y dijo
está listo para adoptar nuevas medidas si el presidente Nicolás Maduro "persiste en su camino para imponer un régimen autoritario".
"El pueblo venezolano está hambriento y su país está colapsando", afirmó Trump en un discurso que pronunció en la primera sesión del debate de alto nivel de la Asamblea General de la ONU.
"La dictadura socialista de Maduro ha generado un dolor terrible y un sufrimiento al pueblo de ese país", agregó el gobernante.
En su discurso, Trump criticó la "corrupción" que ha "destruido una próspera nación, imponiendo la ideología, generando pobreza y miseria en todos los lugares donde ha llegado".
Además, señaló que Maduro "ha desafiado a su pueblo" impulsando una Asamblea Constituyente para "preservar su desastroso gobierno".
"Esta situación es completamente inaceptable y no podemos quedar al margen", insistió.
Afirmó que Estados Unidos ha "adoptado importantes" pasos para hacer responsable al Gobierno de Maduro de sus acciones.
"Estamos listos para adoptar acciones futuras si el gobierno de Venezuela persiste en su camino para imponer un régimen autoritario contra el pueblo venezolano", insistió.
Desde su llegada a la Casa Blanca, Trump puso mano dura a Cuba revirtiendo parte del plan de acercamiento impulsado por su predecesor, el expresidente Barack Obama.
Previamente, funcionarios cubanos enviaron mensajes conciliatorios a través de medios como Reuters, Associated Press y CNN, en los que mostraban disposición incluso a negociar un nuevo acuerdo con Trump.
La respuesta de la Casa Blanca no fue positiva. Un alto funcionario de su gobierno dijo recientemente que sopesan el eventual cierre de la embajada, en respuesta al caso de "ataque sónico" contra diplomáticos estadounidenses basados en La Habana, que ha puesto leña al fuego entre las dos naciones.
Los principales cambios ordenados por Trump son una prohibición
para que las empresas de Estados Unidos hagan negocios con compañías cubanas de propiedad o controladas por las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Cuba y restricciones a los viajes de ciudadanos
estadounidenses a la isla.
[Redactado por Rosa Tania Valdés]