La tensión vuelve a las calles de Filadelfia por segunda noche. Las protestas por la muerte de un afroamericano a manos de la policía el pasado lunes han derivado en episodios de vandalismo y saqueos de comercios.
La violencia estalló después de que la policía matara el lunes a un hombre de 27 años identificado como Walter Wallace Jr., que sufría de problemas de salud mental según su familia. Como muestra un video que circula en las redes sociales, Wallace recibió varios disparos de dos policías para los que no representaba una amenaza inminente.
El propio padre de la víctima ha comparecido ante los medios para pedir que por respeto a su familia paren la violencia y el caos que ha causado la muerte de su hijo.
La policía advirtió en Twitter que una "gran multitud" de unas mil personas estaba saqueando negocios en los barrios de Castor y Aramingo y recomendó a los residentes que "eviten el área".
Imágenes tomadas por un helicóptero parecen mostrar a personas saqueando una tienda Foot Locker y otro negocio.
La oficina del gobernador de Pensilvania, Tom Wolf, anunció el despliegue de cientos de soldados de la Guardia Nacional a la ciudad para "proteger el derecho a la reunión y la protesta pacífica mientras se mantiene a las personas a salvo".
Una ola de protestas antirracistas, que a veces han derivado en episodios de violencia, ha recorrido Estados Unidos desde la muerte de George Floyd, un hombre negro asesinado por un policía blanco a finales de mayo.
"Estamos monitoreando la situación de cerca. Estamos listos para desplegar recursos federales, si es necesario. El presidente Trump no tolerará la violencia hacia las fuerzas del orden de Estados Unidos", declaró Alyssa Farah, directora de comunicaciones de la Casa Blanca.
Mientras el candidato presidencial demócrata de Estados Unidos, Joe Biden, instó el miércoles a la calma diciendo que los manifestantes tenían derecho a manifestaciones pacíficas pero no a la destrucción.
"No hay excusa alguna para el saqueo o la violencia", dijo el exvicepresidente a los periodistas después de emitir su voto en Wilmington, Delaware.