Como sugirió la semana pasada en una rara entrevista televisiva el cardenal Jaime Ortega, el Gobierno de Cuba decidió conceder indultos en ocasión de la visita a la isla del papa Francisco, aunque precisó que la medida no beneficiará a los presos políticos o "por delitos contra la Seguridad del Estado".
La medida, que sería efectiva en las 72 horas siguientes a la publicación de la información, beneficiará a 3.522 reclusos, entre ellos "personas con más de 60 años de edad, jóvenes menores de 20 años sin antecedentes penales, enfermos crónicos, mujeres, varios que arribaban al término establecido para la libertad condicional en el año 2016, y una parte de quienes cumplen la pena y laboran en condiciones abiertas, así como extranjeros, siempre que el país de origen garantice su repatriación", según la nota publicada en los medios oficiales.
El Consejo de Estado tuvo en cuenta para tomar la decisión "la naturaleza de los hechos por los que fueron penados, su comportamiento en prisión, el tiempo de cumplimiento de la sanción y razones de salud".
La información precisa que salvo excepciones por razones humanitarias quedaron excluidos los sancionados por asesinato, homicidio, violación, pederastia con violencia, corrupción de menores, hurto y sacrificio ilegal de ganado mayor, tráfico de drogas, robo con violencia e intimidación en las personas en sus modalidades agravadas y delitos contra la Seguridad del Estado.
La exclusión de los presos políticos parece una respuesta del Gobierno a la campaña #TodosMarchamos que viene librando la oposición con actividades dominicales en favor de una amnistía para estos sentenciados.
La nota oficial destaca que los indultos se conceden "al igual que aconteció cuando nos visitaron los Sumos Pontífices Juan Pablo II y Benedicto XVI", cuando fueron excarcelados dos centenares de reclusos y cerca de 3.000, respectivamente.
Durante una entrevista en la televisión cubana con el cantautor Amaury Pérez, el cardenal Ortega había barajado la posibilidad de que se concedieran indultos durante la visita.
Dijo haber recibido muchas cartas de personas que esperan que haya un indulto o una amnistía con la visita del papa Francisco: "No sé si la habrá o no, quizás sí la haya, eso depende de la libertad del Estado cubano". Sugirió que, de concretarse, podría haber entre los beneficiarios personas que han cometido delitos económicos para quienes sus familiares han pedido la mediación de la Iglesia. "Todo eso lo he puesto en manos de las autoridades para ver si hay posibilidades de indulto para esas personas", concluyó.
Con respecto a los presos políticos, dijo que "Hay varias listas ahora que no coinciden ninguna, algunos ponen a unos, otros ponen a otros. Yo les dije: 'Llévenmelas a mi casa, yo las presento'". Ortega había sido criticado por declarar en España a la Cadena Ser que en Cuba ya no quedaban presos políticos.
Según las últimas cifras confirmadas por la independiente Comisión Cubana de Derechos Humanos y Reconciliación Nacional, a mediados de julio había en la isla 60 presos políticos. Aunque entre las consideraciones de los indultos se menciona el tiempo de cumplimiento de la sanción, la Comisión había identificado a 21 de los 60 cuya liberación podía haberse recomendado por llevar entre 12 y 23 años en prisión, pero que no fueron incluidos.
Además de los actualmente recluidos, 11 de los 75 disidentes detenidos durante la Primavera Negra del 2003 que decidieron no marchar al exilio permanecen bajo licencia extrapenal y no se les permite viajar al extranjero.