Cuba reportó este miércoles 816 nuevos casos de COVID-19 y otras tres muertes a causa de la enfermedad, que ya ha dejado 69,802 contagios y 408 fallecidos en el país desde marzo de 2020.
Mientras, el gobierno cifra sus esperanzas de frenar el virus con una campaña de vacunación que ha comenzado desde la fase de ensayos clínicos.
Según informaron en una reunión del Consejo de Defensa Provincial de La Habana, hasta el martes habían sido inmunizados con el candidato vacunal Soberana 02 más de 13,500 personas, entre ellas 10,221 trabajadores de la salud.
Permanecen hospitalizadas 20,573 personas: 3,818 sospechosas de portar el virus, 13,421 en vigilancia y 3,334 casos activos. En terapia intensiva se atiende a 64 pacientes: 23 críticos y 41 graves.
Según el Dr. Francisco Durán García, jefe de Epidemiología del Ministerio de Salud Pública (MINSAP), 108 de los contagiados son niños y adolescentes. Un total de 8,225 pacientes en edades pediátricas han sido diagnosticados con COVID-19 desde que comenzó la pandemia; de ellos, 427 son lactantes.
De los casos de coronavirus reportados en la jornada, 808 son autóctonos, la cifra más alta desde el 13 de marzo, subrayó el sitio oficialista Cubadebate.
Ocho casos son importados, con fuente de infección en el extranjero, y en 26 se desconoce el origen del contagio, añade el reporte del MINSAP.
Con 447 casos, La Habana sigue siendo el epicentro de este tercer rebrote de coronavirus en la isla. Los municipios más afectados son Diez de Octubre (58), Centro Habana (50), Boyeros (45) y Arroyo Naranjo (43).
Le sigue la provincia de Granma (100), con un brote de la enfermedad en la capital, Bayamo, que solo en el día reporta 81 casos.
