Los periodistas en muchos lugares del mundo se enfrentan a un deterioro del entorno en el que trabajan, según un organismo de supervisión democrática que registró un drástico declive en la libertad de prensa durante 2014.
En su informe anual, publicado el miércoles, el grupo Freedom House indicó que la libertad de prensa en el mundo bajó el año pasado a su punto más bajo en más de 10 años. Sólo una de cada siete personas vivían en países donde la cobertura de noticias políticas era sólida, la seguridad de los periodistas está garantizada y la intromisión del Estado en los asuntos de los medios es menor, señaló la organización.
Cuba está en la lista conocida como "The Worst of the Worst" ("lo peor de lo peor"), donde se ubican a las 10 naciones con más violaciones a la libertad de prensa. En la lista están, además, Bielorrusia, Crimea, Guinea Ecuatorial, Eritrea, Irán, Corea del Norte, Siria, Turkmenistán y Uzbekistán.
En los primeros puestos se encontraban Noruega, Suecia y Bélgica. Estados Unidos quedó en el puesto 34 de los 199 países y territorios analizados.
Un importante factor que contribuyó al declive fueron nuevas leyes que restringen a los medios, señaló Freedom House. El informe menciona normas en Rusia y México que impusieron nuevos controles sobre los blogs. La violencia física y la intimidación de periodistas siguieron siendo un problema, especialmente en lugares como Siria y Nigeria.
"Los Gobiernos emplearon las leyes antiterroristas o de seguridad como pretexto para silenciar voces críticas", indicó la directora de proyecto del informe, Jennifer Dunham. "Los grupos armados y bandas criminales emplearon tácticas cada vez más descaradas para intimidar a periodistas, y los propietarios de medios intentaron manipular el contenido noticioso para servir a sus intereses políticos o empresariales".
Freedom House clasifica a los países como libres, parcialmente libres o no libres. De los países estudiados el año pasado, la organización describió a 63, el 32%, como libres; 71, el 36%, como parcialmente libres; y 65, el 32%, como no libres.
La organización conservó a Cuba entre los 10 países más represivos del mundo pese al reciente acercamiento de la isla a Estados Unidos.