Agentes federales arrestaron este jueves a 18 sospechosos bajo cargos de operar una red de farmacias en Miami-Dade que servían como pantalla para robar millones de dólares al Medicare.
El diario El Nuevo Herald publica que se cree que otros cuatro sospechosos, que de alguna manera conocieron de la investigación del FBI, han huido a Cuba, donde decenas de fugitivos de estafas al Medicare han encontrado refugio desde hace varios años.
"Se calcula que 150 personas del sur de la Florida acusados de estafa al Medicare están en Cuba, México y otros países", afirma el Herald.
Hasta el momento se desconoce qué farmacias están involucradas en la operación. Tampoco se ha revelado la identidad de los arrestados, que podrían ser presentados este viernes ante los tribunales.
Los agentes federales arrestaron a los acusados, quienes usaron más de 10 farmacias para estafar millones de dólares al Gobierno federal.
Los individuos están acusados de confabularse para estafar al programa federal de seguro médico mediante el pago a personas que se dedicaban a atraer a beneficiarios del Medicare, de manera que pudieran usar sus identificaciones para presentar reclamaciones falsas por medicamentos recetados, según las autoridades.
Las autoridades informan que se enriquecieron ilegalmente mediante la falsificación de firmas de médicos para emitir recetas de medicamentos que no eran necesarios o sencillamente no se expidieron.
El Medicare y las aseguradoras privadas no detectaron la estafa después de pagar millones, un antiguo problema, debido a la poca atención de las autoridades normativas federales.
En varios de los casos penales más recientes en Miami, dueños de farmacias pagaban a pacientes o a personas que se dedicaban a reclutar a pacientes, para generar una gran cantidad de reclamaciones falsas al Medicare, y así aprovecharse de la Parte D del programa, señaló El Nuevo Herald.
El programa llamado Parte D, creado en 2006, entrega medicamentos por receta a casi 40 millones de personas mayores y discapacitadas, quienes las compran en farmacias a las que las aseguradoras privadas y el Medicare les reembolsan.
Sin embargo, el programa ha sido aprovechado por los estafadores, utilizando farmacias que presentan recetas falsas por antidepresivos, antiinflamatorios y otros medicamentos por receta.
