Los senadores Marco Rubio (republicano por Florida) y Bob Menendez (demócrata por New Jersey) exigieron al gobierno cubano la devolución de fugitivos de la justicia estadounidense que se refugiaron en la isla "con el fin de evitar el procesamiento o confinamiento por delitos penales".
Rubio y Menendez presentaron una resolución en la que solicitan la extradición de Joanne Chesimard, conocida como Assata Shakur, William Morales y otros fugitivos de Estados Unidos que se encuentran en Cuba.
"Mientras buscamos una política más responsable entre Estados Unidos y Cuba, debemos dejar claro que Cuba debe poner fin a la vergonzosa práctica de albergar a los fugitivos estadounidenses que han cometido actos atroces, como el asesinato de oficiales de policía estadounidenses, el secuestro de aviones o el tráfico de armas", dijo Menendez en un comunicado.
En mayo de 1973, Chesimard y dos cómplices ejecutaron al agente de policía del estado de New Jersey, Werner Foerster. Aunque Chesimard fue juzgada, condenada y sentenciada a cadena perpetua, escapó de una prisión federal el 2 de noviembre de 1979 y actualmente es una fugitiva en Cuba, detalla una nota publicada en el sitio oficial del senador Rubio.
William Morales, líder y fabricante de bombas para la organización terrorista FALN, "cometió numerosos ataques terroristas en territorio estadounidense", incluidos los bombardeos de la taberna Fraunces en el bajo Manhattan en 1975 y la oficina de empleo de Mobil Oil en Nueva York en 1977, en la que murieron cinco personas y más de 60 resultaron heridas, agregó la nota.
La resolución nombra también a Charles Hill, buscado por el asesinato de un policía de Nuevo México, y Víctor Manuel Gerena, incluido en la lista de los 10 más buscados del FBI por llevar a cabo un robo brutal de un vehículo blindado de Wells Fargo en Connecticut.
Según el documento, se cree que más de 70 fugitivos estadounidenses acusados de delitos que van desde el secuestro hasta el asesinato, han obtenido refugio en Cuba.
La Orden Fraternal de la Policía respaldó la resolución en una carta a los senadores. "La sangre de los policías estadounidenses derramados mientras hacen su trabajo (...) exige justicia y la protección deliberada de estos asesinos no debe ser tolerada dentro de la comunidad de naciones", señaló la misiva, citada por NJ.com.
Chessimard, miembro de la organización armada Ejército de Liberación Negro, se convirtió en 2013 en la primera mujer incluida en la lista de terroristas más buscados del Buró Federal de Investigaciones (FBI).
El FBI y la Oficina del Fiscal General de New Nueva Jersey han ofrecido 2 millones de dólares a quien proporcione información que conduzca al arresto de la fugitiva.