Familiares del joven Walnier Luis Aguilar Rivera esperan una revisión de su caso tras ser sentenciado la pasada semana a 23 años de cárcel por el presunto delito de “sedición”.
Su padre, Luis Wilber Aguilar, comunicó a Radio Martí que, en la entrevista de este martes, una funcionaria del Departamento de Atención a la Población del Consejo de Estado le informó que tendrá una respuesta los primeros días de enero de 2022.
“Me dijeron que tiene unos cuantos beneficios porque en 21 años nunca ha ido a una prisión, nunca ha tenido nada (de antecedentes). Me dijo que iban a investigar todo eso y, en los primeros días de enero, me daban una respuesta”.
Aguilar Rivera, según su familia, presenta trastornos mentales y es un joven sin antecedentes, algo que le serviría de atenuante, según le informó a su padre la funcionaria que lo atendió.
El juicio al joven de La Güinera se celebró la pasada semana en el Tribunal Municipal Popular de 10 de Octubre. Allí fueron sentenciados 17 manifestantes del 11 de julio, todos residentes en ese barrio habanero. Según el padre, quien estuvo presente en el proceso, el jueves 23 fueron dictadas las sentencias.
Largas condenas a manifestantes pacíficos
“A ver, pónganse de pie los acusados”, relató. “Fulano de Tal, tanto (años); Mengano de Tal, tanto […] Las madres llorando, gritando, los abogados también nos miraban… y entonces, cuando íbamos saliendo, la jueza también empezó a llorar, desesperada, sabiendo la injusticia que se estaba cometiendo ahí”.
También Ángel Serrano, de 54 años, fue condenado la pasada semana a 23 años de privación de libertad por manifestarse pacíficamente en La Güinera. Su hijo, Henry Serrano Cabrera. así lo explicó a Radio Martí.
“De 22 años, le subió a 23 años de privación de libertad. A nuestros familiares, que uno le dice ‘fueron tantos años’, se quedan ‘fríos’; todo el mundo expresa lo mismo: ‘¿eso qué cosa es?, eso es una locura”.
Henry asegura que los abogados de la defensa trataron de hacer su mejor trabajo, pero recibieron presiones para limitar su labor.
“Si no pudieron defender del todo es porque, cuando dieron el tiempo de receso, al nosotros entrar, nos enteramos de que a los abogados se les había pedido ‘que no hablaran mucho”.
Por su parte, el padre del joven Walnier Aguilar dijo a Radio Martí que, de no recibir respuestas, las acciones por la liberación de su hijo y de los demás manifestantes no se detendrán.
“Yo voy a esperar los primeros días de enero, que fue lo que me dijeron. Si yo, el 7 o el 8, no tengo respuesta, yo lo siento, pero tengo como cuatro o cinco (números de) teléfonos, y me han dicho: “me avisas, porque ya no puedo aguantar más”, advirtió.
