Ante el deterioro de la salud de la presa política Xiomara Cruz Miranda, la policía política decidió enviarla bajo tratamiento médico desde Ciego de Ávila al hospital habanero de La Covadonga.
Cruz Miranda es integrante del movimiento Damas de Blanco, fue sancionada a en 2018 a un año y cuatro meses de cárcel, acusada de "amenaza", un delito usado regularmente contra los opositores pacíficos junto a los de “atentado”, resistencia” y “desacato”.
Como castigo adicional a mujer la obligaron a cumplir la sanción a más de 400 kilómetros de su lugar de residencia.
Este viernes, la hija de la opositora, Mercedes Iznaga, confirmó a Radio Televisión Martí el retorno de la mujer hacia el hospital habanero.
“Me llamó, que la habían trasladado para el hospital de aquí, de La Covadonga (…) no pudo hablar mucho conmigo, fue una cosa rápida, que si tenía un chance me iba a llamar para explicarme”, relató.
Según citó la hija en la entrevista, a Cruz Miranda la habrían ubicado en la ‘Sala de penados’, un local para reclusos en los hospitales cubanos. En junio pasado ella misma denunció que su madre fue hospitalizada en un centro hospitalario en Ciego de Ávila, debido a una erupción en la piel, pero sin que lograra el traslado hacia la capital.
“El traslado de ella para La Habana es por el diagnóstico médico, que no dieron con lo que ella tiene, para ver si la pueden ver unos especialistas aquí”, explicó.
Cruz Miranda comenzó a cumplir su sanción en la prisión de Mujeres conocida como El Guatao, pero sin derecho a reclamar, fue trasladada a la capital avileña.
Otras tres Damas de Blanco permanecen en cárceles cubanas: Marta Sánchez, Nieves Matamoros, y Aymara Nieto Muñoz.
[Con entrevista de audio de Ivette Pacheco e información de Radio Televisón Martí]