La Escuela de Periodismo de la Universidad de Columbia, en Nueva York, entregó esta noche a la bloguera cubana Yoani Sánchez el Premio María Moors Cabot, el galardón internacional de periodismo más antiguo del mundo.
Yoani recibió el premio en el 2009, pero en esa ocasión las autoridades comunistas cubanas le negaron el permiso de viajar al extranjero.
La bloguera cubana, autora de la página Generación Y, reside en La Habana pero se encuentra de visita en Estados Unidos, donde asistió en el día de ayer a la Asamblea General de la Sociedad Interamericana de Prensa.
Junto a Yoani ganaron el Premio María Moors Cabot en 2009, categoría medalla de oro, Anthony DePalma, corresponsal, The New York Times; Christopher M. Hawley, corresponsal en América Latina, USA Today y The Arizona Republic; y Merval Pereira, columnista, O Globo (Brasil).
La Escuela de Periodismo de la Universidad de Columbia dijo en su momento que “Los ganadores de los premios Cabot 2009 ejemplifican la mejor cobertura tradicional de las Américas y el uso más audaz del periodismo digital por superar las barreras que por tanto tiempo han opacado regiones del continente en donde la prensa libre ha luchado por ser reconocida”.
Yoani recibió el premio en el 2009, pero en esa ocasión las autoridades comunistas cubanas le negaron el permiso de viajar al extranjero.
La bloguera cubana, autora de la página Generación Y, reside en La Habana pero se encuentra de visita en Estados Unidos, donde asistió en el día de ayer a la Asamblea General de la Sociedad Interamericana de Prensa.
Junto a Yoani ganaron el Premio María Moors Cabot en 2009, categoría medalla de oro, Anthony DePalma, corresponsal, The New York Times; Christopher M. Hawley, corresponsal en América Latina, USA Today y The Arizona Republic; y Merval Pereira, columnista, O Globo (Brasil).
La Escuela de Periodismo de la Universidad de Columbia dijo en su momento que “Los ganadores de los premios Cabot 2009 ejemplifican la mejor cobertura tradicional de las Américas y el uso más audaz del periodismo digital por superar las barreras que por tanto tiempo han opacado regiones del continente en donde la prensa libre ha luchado por ser reconocida”.
