Activistas, artistas y periodistas independientes califican de excelente y beneficioso el servicio que brindó por años la Oficina de Intereses de Estados Unidos en La Habana a la sociedad civil cubana. Aseguran que están totalmente desinformados sobre el camino que tomarán las relaciones de la embajada con la ciudadanía a partir del 14 de agosto, cuando oficialmente se realice la ceremonia de apertura.
Eralides Frómeta, residente en la capital, terminó el pasado mes un curso de Periodismo y dijo a Martí Noticias que entre los servicios más destacados en ese lugar figuran los cursos de inglés, de periodismo y de computación y el acceso a una sala de internet de forma gratuita que les permite hacer búsquedas, enviar correos electrónicos y publicar en blogs y redes sociales.
"El acceso a la Oficina de Intereses nunca estuvo condicionado a posiciones ideológicas ni adhesión a grupos opositores", señaló Frómeta.
Entre otras funciones, "la SINA siempre contribuyó al intercambio directo entre los cubanos exiliados y los residentes en la isla a través de videoconferencias y ayudó a que los opositores entendiéramos con claridad qué es la democracia y el respeto a los Derechos Humanos", dijo Guillermo Fariñas, conocido opositor que reside en Santa Clara, al centro de la isla.
"Los artistas, los escritores y los activistas encontraron siempre en el lugar una puerta abierta para el acceso a la información sin censura", dijo el Premio Sájarov.
"Nos proporcionaron la posibilidad de acceder a literatura censurada por el Gobierno cubano, materiales audiovisuales que nos ayudaron a ampliar la visión cultural y abierta del mundo. Y lo más importante fue que logró con esa acción que otras embajadas (europeas) también abrieran sus puertas a los cubanos", explicó Fariñas.
El expreso político Ángel Moya Acosta, residente en La Habana, acudía a la sala de internet a publicar sus materiales audiovisuales en YouTube, Facebook y Twitter y recuerda que "el servicio siempre fue excelente".
Moya agradece la atención que siempre tuvieron en el Departamento de Derechos Humanos donde presentaban los informes de las violaciones cometidas por el régimen contra la ciudadanía: "Siempre nos escucharon nuestros puntos de vista y se interesaban por saber cómo pensaba la sociedad civil".
El periodista independiente Lázaro Yuri Valle destacó positivo que todos los cubanos pudieran acceder al lugar y señaló que son decenas de compatriotas los que se favorecieron con esos servicios.
Mientras que el periodista independiente de Primavera Digital Ernesto Travieso, quien nunca ha usado los servicios de la SINA en cuanto a internet y cursos, se ha animado a participar en los múltiples concursos que ha convocado la representación estadounidense en La Habana.
En Santiago de Cuba, Karina Salgado, de 25 años de edad y graduada de Economía, dijo que nunca fue a la SINA a disfrutar de los beneficios que brindaba porque es muy difícil viajar hasta la capital, pero reconoce que varios conocidos lo hacían y se sentían satisfechos.
La joven se siente esperanzada en que ahora que hay una embajada, se inaugure un consulado en la región Oriental de Cuba porque así "no tendrán que viajar a la capital".
¿Y el futuro de las relaciones ahora que es una embajada?
Para los encuestados, el futuro de las relaciones de la sociedad civil con la Embajada de Estados Unidos en Cuba los mantiene en un gran desconcierto.
"En varias ocasiones pregunté a los funcionarios de la SINA cómo serán las relaciones con ellos y nosotros a partir del 14 de agosto, pero nadie me ha dado respuesta, por eso yo estoy escéptico. No se sabe qué va a pasar", señaló Ángel Moya.
Lázaro Yuri Valle destacó que en las últimas semanas están cerrados todos los servicios que antes se ofrecían y a nadie le han dicho si después del 14 volverán a ofrecerles la posibilidad de acceder a internet.
"Lo que sí han dicho es que no habrá nuevos cursos de Periodismo".
Para Fariñas, el futuro de las relaciones de la Embajada de Estados Unidos con el pueblo cubano pasa porque el personal diplomático se percate de que están en un lugar donde no hay libertad: "Pienso que lo primero que tiene que hacer la embajada es comprometerse a estar de manera irrevocable en función de la democratización y de la libertad".
A su juicio, en el futuro debe ampliar más el trabajo que hacían como Sección de Intereses: "Deben abrirse más consulados en otras provincias de Cuba en la misma medida que el Gobierno cubano establece consulados en otras ciudades de Estados Unidos".
