Con el delito de "usurpación de capacidad legal” el régimen de la isla acosa a los periodistas independientes en Cuba por ejercer el Periodismo sin la debida certificación, pero al parecer esta figura legal no toca a quienes escriben para medios oficiales.
El delito, comprendido en el ARTICULO 149 del Código Penal dentro del "Ejercicio Fraudulento de Funciones Públicas", sanciona a quien "con ánimo de lucro u otro fin malicioso, o causando daño o perjuicio a otro, realice actos propios de una profesión para cuyo ejercicio no está debidamente habilitado, incurre en sanción de privación de libertad de tres meses a un año o multa de cien a trescientas cuotas o ambas".
El delito está pensado para proteger a la sociedad de los falsos médicos, abogados, ingenieros, arquitectos o jueces pero jamás se ha ejercido contra el Periodismo, apunta el abogado Roberto Jesús Quiñones en entrevista con Radio Martí.
El también comunicador independiente mencionó a figuras ilustres de la cultura cubana, provenientes de otras carreras, que han ejercido como excelentes periodistas. Tal es el caso de José Martí, Regino Boti, Agustín Acosta, José María Chacón y Calvo, Julio Antonio Mella, Alejo Carpentier y Nicolás Guillén.
“Si la Seguridad del Estado comete la barrabasada de sancionar a los periodistas independientes cubanos por este delito, no sé qué va a hacer con la doctora Graciela Pogolotti, Iroel Sánchez, Julio César Guanche y con Enrique Ubieta, porque ninguno de ellos estudió Periodismo y lo ejercen constantemente, porque además tendrían que demostrar, en el caso nuestro, que ejercemos el Periodismo con fines de lucro, que lo hacemos con un fin malicioso, que le estamos causando daño o perjuicio a otro, y además tendría que demostrar que el requisito de la habilitación está establecido. En Cuba no hay Ley de Prensa y si no hay Ley de Prensa pues ellos no pueden desde el punto de vista técnico exigir esto”.
El abogado considera que con la persecución por este delito la Seguridad del Estado toma una medida incongruente: “Ellos dicen que nadie nos lee, que nadie nos hace caso, entonces ¿por qué dedican tantos recursos financieros y tanto despliegue de personal para reprimirnos, si no presentamos ningún peligro?”.
En los últimos meses numerosos periodistas independientes han sido amedrentados con aplicarles esta figura delictiva.
Recientemente tres realizadores de audiovisuales del municipio Songo-La Maya fueron acusados por usurpación de funciones.
Los realizadores Yordanis Labrada, su esposa Arianna Avila y Alexander Avila fueron citados por la Policía de La Maya para un interrogatorio luego de publicar en YouTube la serie de audiovisuales “Crece la Miseria en el Oriente cubano”.
[Con reportes de Tomás Cardoso e Idolidia Darias]