La propuesta del senador cubanoamericano Marco Rubio para que los cubanos que llegan a EEUU sean tratados como los demás inmigrantes ha abierto un debate en la comunidad cubanoestadounidense de Miami, parte de la cual reconoce que se "abusa" de los privilegios que les confiere la ley, y también de cubanos dentro de la isla.
Desde Cuba, José Daniel Ferrer, líder de UNPACU, entiende que la Ley de Ajuste Cubano se ha convertido por desgracia en un mecanismo que hace que mucha gente solo piense en buscar en otras partes, “lo que nos corresponde conquistar en nuestro suelo”.
Sin embargo, el opositor Manuel Cuesta Morúa explica que las razones por las que los cubanos emigran tienen que ver con un régimen que no les permite gestionar su vida privada y su propio bienestar. “Aquí son perseguidos los trabajadores por cuentapropia, son perseguidos los activistas y somos perseguidos todos”.
Por su parte, el periodista independiente Orlando Freire Santana, opina que la ley de ajuste es una válvula que usa el régimen para aliviar la presión interna. Están aumentando situaciones como las que se están produciendo ahora en la frontera de Costa Rica y Panamá.
Mientras, algunos cubanos del exilio acusan a Rubio de traicionar a los suyos, y otros admiten que es necesario poner coto a los abusos, al tiempo que ciudadanos comunes escriben en las redes sociales a favor y en contra de la iniciativa.
Tomás Rodríguez, de la organización Agenda Cubana, se mostró partidario de usar "los mecanismos" que existen en la propia ley para su cumplimento y "para regular unos abusos que toda la comunidad sabe que existen", según dijo a la agencia de noticias EFE.
Ramón Saúl Sánchez, del Movimiento Democracia, consideró, por su parte, que tiene que haber una razón política para que Rubio "quiera quitar derechos a su propia gente", pues "las cosas no han cambiado en Cuba" y los cubanos siguen buscando refugio en EE.UU.
Ángel Defana, de Plantados, opinó que no hay que eliminar la Ley de Ajuste cubano, pero sí reformarla para que se ajuste a su "espíritu" original que es el de proteger a los opositores al régimen cubano y los perseguidos de todo tipo.
"La ley debe permanecer, pues todavía hay persecución en Cuba", dijo el dirigente de Plantados, quien coincidió con Rubio en que hay "abusos" y señaló que se sabe que hay cubanos que al cabo de dos años regresan a Cuba con la ciudadanía y la ayuda.
A juicio del senador, la particularidad que confiere la ley a los cubanos "ya no está justificada" y los llegados de Cuba deben ser considerados como la generalidad de los inmigrantes.
Según Rubio, no solo se está abusando de la norma sino que "es dañina para los contribuyentes fiscales".
En virtud de la Ley de Ajuste, los cubanos que ponen pie en territorio estadounidense -los interceptados en el mar son repatriados- reciben automáticamente estatus de refugiado político, ayuda económica para iniciar una nueva vida y al cabo de dos años la ciudadanía.
Además del proyecto de ley de Rubio hay otro en el mismo sentido en la Cámara de Representantes presentado por el legislador Carlos Curbelo, republicano de origen cubano como el senador por Florida.