Enlaces de accesibilidad

Manifestantes toman casa presidencial en Sri Lanka


Manifestantes en la casa presidencial en Colombo, Sri Lanka.
Manifestantes en la casa presidencial en Colombo, Sri Lanka.

El primer ministro de Sri Lanka, Ranil Wickremesinghe, está dispuesto a dimitir para dar paso a un Gobierno de todos los partidos, dijo su oficina en un comunicado el sábado, después de que miles de manifestantes asaltaron la residencia oficial del presidente en Colombo.

Los soldados y la policía fueron incapaces de contener a la multitud de manifestantes que coreaban pidiendo la dimisión del presidente Gotabaya Rajapaksa, en un momento en el que crece la ira pública por la peor crisis económica en el país en siete décadas.

Los manifestantes también forzaron la entrada en el Ministerio de Finanzas y en las oficinas del presidente frente al mar.

Rajapaksa abandonó la residencia oficial el viernes como medida de seguridad antes de la manifestación prevista para el fin de semana, dijeron dos fuentes del Ministerio de Defensa. Reuters no pudo confirmar inmediatamente el paradero del presidente.

Wickremesinghe mantuvo conversaciones con varios líderes de partidos políticos para decidir qué medidas tomar tras los disturbios.

"Wickremesinghe ha comunicado a los líderes de los partidos que está dispuesto a dimitir como primer ministro y dar paso a un Gobierno de todos los partidos para que tome el relevo", dijo su oficina en un comunicado

Wickremesinghe también ha sido trasladado a un lugar seguro, dijo una fuente gubernamental a Reuters.

Los líderes de varios partidos de la oposición también han pedido la dimisión de Rajapaksa.

"El presidente y el primer ministro deben dimitir inmediatamente. Si eso no ocurre, la inestabilidad política empeorará", ha dicho el líder del Partido de la Libertad de Sri Lanka y expresidente Maithripala Sirisena, hablando antes de que Wickremesinghe ofreciera su dimisión.

Una retransmisión en directo en Facebook desde el interior de la casa del presidente mostró a cientos de manifestantes, algunos de ellos ataviados con la bandera nacional, agolpándose en habitaciones y pasillos.

Las imágenes de vídeo mostraban a algunos de ellos chapoteando en la piscina, mientras otros se sentaban en una cama con dosel y en sofás. En las imágenes que circularon por las redes sociales se podía ver a algunos vaciando una cómoda.

Cientos de personas se arremolinaban en los terrenos de la residencia de la era colonial encalada, sin personal de seguridad a la vista.

Al menos 39 personas, entre ellas dos policías, resultaron heridas y fueron hospitalizadas durante las protestas, informaron fuentes hospitalarias a Reuters.

La isla del Océano Índico, de 22 millones de habitantes, se enfrenta a una grave escasez de divisas que ha limitado las importaciones esenciales de combustible, alimentos y medicinas, sumiéndola en la peor crisis económica desde su independencia en 1948.

XS
SM
MD
LG